I LXXXE U |TomJake|

6 - Cuidado con ilusionarse

Lo había publicado mal jaja
2do intento

— 🔞—

El domingo fue un día extraño para ambos hombres: Jake volvió a la casa que compartía con Miriam para hacer quehaceres que había descuidado y preparar un bolso de cosas para llevarle a la anciana cuando la viera en la clínica. Tom en cambio se la pasó todo el día divagando, intentó seguir con su rutina habitual de domingo (que era principalmente descansar y jugar con Gabs), pero su departamento se sentía un poco vacío. Se escribieron unos cuantos mensajes, pero nada realmente trascendental, era más para no sentirse tan solos y fingir como que el otro seguía allí.

Cuando el lunes llegó, Tom no podía mentirse a sí mismo, se sentía emocionado por volver a ver a Jake, aunque sólo hubiera pasado un día. Se había levantado más temprano, aumento peso en su rutina de ejercicio, y su articulación no dolió tanto en su sesión de fisioterapia, el sol parecía más brillante y todo en el aire se sentía bien.

Cuando se lo comentó a Aiden por videollamada, el chico lo desestimó.

— El día está normal — dijo con una expresión de curiosidad —, el que se ve muy entusiasmado eres tú.

Tom se encogió en su lugar y una sonrisita tonta se le escapó, y Aiden se dio cuenta inmediatamente.

— Ohhh, conozco ese tipo de expresión, ¡estás interesado en alguien!

— ¡N-no es así! — el pelinegro sintió el calor hasta las orejas por el canturreo de su amigo, que no se detenía.

— ¡Claro que sí! — rió —. No me mientas, Thomas, te conozco.

Desvió la mirada y sabía que se había expuesto totalmente, Aiden lo leyó como un libro abierto. Pero no iba a dejárselo sencillo.

— No, quiero decir, si, tal vez estoy más contento, pero eso no tiene nada que ver con haber conocido a alguien.

Aiden se cruzó de brazos, reacio a dejar ir el tema.

— No te lo creo — dijo apuntando a la pantalla — ¿Por qué estás tan feliz entonces?

— No lo sé, sólo me levanté bien hoy.

— Nadie se levanta feliz un lunes, Tom, ahí hay algo más.

Tom se mordió la mejilla cuando una atípica cabellera azul se le vino a la mente, pero descartó el pensamiento rápidamente.

— Voy a visitar a Miriam hoy, ¿tal vez sea eso? Hace bastante que no la veía, con todos sus estudios...

La expresión del bicolor cambió inmediatamente al escuchar de la anciana y sus problemas de salud.

— ¿Cómo está ella?

Tom se limitó a encogerse de hombros, su sonrisa decayó a una más triste.

— No tan bien, venía mejorando pero tuvo una recaída hace unas semanas.

— Oh, lo siento mucho — dijo sinceramente, por un momento dudo en preguntar, pero lo hizo de todos modos — ¿Cómo está Jake?

Tom se tensó un poco, no porque fuera Aiden preguntando por el peliazul, después de todo ambos chicos habían quedado en buenos términos después del programa, sino porque no había sido un tema de conversación común entre ellos desde que él y Tom habían decidido no retomar su relación.

Aiden sabía que ambos querían, pero una vez más los hombres adultos se habían dejado llevar por el miedo y las inseguridades.

— Él está... ¿bien? — sonó dudoso —. Más o menos, lo vi llorar una vez cuando me dijo, pero luego no hablamos mucho más del tema, no le pregunté nada más tampoco. Está ocupado juntando el dinero para la operación de Miriam.