Capítulo 24: La declaración de la sacerdotisa

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Unos días después, estábamos en las afueras de Konoha.

"¡Nunca pensé que una misión de última hora como ésta me fastidiaría tanto!" dijo Inuzuka Kiba mientras saltaba sobre las enormes ramas de los árboles a gran velocidad. "¡Tengo una cita programada para mañana!"

"¡Ponte a ello, Kiba!" replicó Akamichi Chouji, igualando su velocidad a pesar de su "peso". "Si tienes una cita, entonces acabemos esta misión cuanto antes. Kakashi-sensei nos envió como equipo de refuerzo inmediato porque el equipo ANBU que escoltaba a Homura Mitokado y Koharu Utatane, dos de los miembros más ancianos del Consejo de Konoha, ¡se metieron en problemas cuando regresaban a Konoha tras su reciente encuentro con el Daimyo del Fuego!".

"Si podemos reunirnos con ellos rápidamente y todo va bien, podremos regresar a Konoha y estar de vuelta antes de mañana por la tarde", dijo Kiba con una sonrisa. "Acabemos con esto cuanto antes, entonces".

"No te apresures a hacer suposiciones, Kiba", intervino Sai. "Como antiguo ANBU, conozco el tipo de entrenamiento por el que hemos pasado todos los ANBU. Por eso sé que el hecho de que un ANBU necesite enviar una llamada de socorro podría significar simplemente que la situación podría ser más grave de lo que parecía."

"Por eso tenemos que llegar a las coordenadas que nos dio Kakashi-sensei y a partir de ahí proceder con cautela". Dijo Yamanaka Ino, que era la líder del equipo de cuatro hombres. "Llegaremos en unos minutos, así que dependiendo de lo que veamos cuando lleguemos, ¡preparaos para cualquier cosa y proceded con precaución!".

Se oyó una fuerte explosión.

"...!" El equipo de cuatro hombres oyó una explosión en el mismo lugar al que se suponía que se dirigían.

"Justo lo que pensaba, Ino", dijo Sai, con semblante serio. "¡Allí se está librando una gran batalla!".

"Realmente pensaba que este tipo de emboscadas serían menos habituales ahora que el Consejo de las Cinco Grandes Naciones Shinobi está en marcha", dijo Kiba con enfado.

"Es inevitable que no todo el mundo esté de acuerdo con la propuesta de la Alianza Shinobi. Siempre quedarán cabos sueltos. Ése es nuestro papel en esta era: ¡resolver esos asuntos!". dijo Chouji mientras tomaba unas píldoras, preparándose para la batalla.

"Así es. Como supervivientes de la anterior Guerra Shinobi y sucesores de la Voluntad de Fuego de Konoha, tenemos que cortar esas malas hierbas que hacían ruido innecesario y amenazaban la paz por la que tanto luchamos..." dijo Ino mientras entrecerraba los ojos en esa dirección concreta.

Sai, Kiba y Chouji asintieron, con una determinación evidente en sus rostros.

"Aseguraos todos de comprender la situación y de actuar correctamente. Tened cuidado". dijo Ino a sus compañeros.

"¡Por supuesto!"

"¡Dispersémonos y cubramos más terreno!"

Chouji, Sai y Kiba desaparecieron de su posición a una velocidad increíble, mientras Ino les seguía, acercándose a la escena desde distintas direcciones.

- Cambio de escena.

Hospital General de Konoha...

Hinata vestía su habitual ropa informal morada, y Sara llevaba el mismo traje rojo que había llevado en Rouran. Caminaban juntas hacia la habitación de Naruto, charlando casualmente de vez en cuando.

Han pasado unos días desde que tuvieron su pequeño encontronazo con la Sacerdotisa del País de los Demonios, Shion. Aún no han arreglado las cosas, pero consiguieron charlar como es debido y llegar a un pequeño compromiso.

Naruto - Otro Camino: Un Futuro ParaleloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora