A veces, la vida nos sorprende con una intensidad tan inesperada que parece desafiar la lógica misma del destino.
Todo comenzó un día con unas simples palabras: "¡Solo ven aquí, P'Freen!" Era una invitación directa de Becky, mi compañera de trabajo y amiga más cercana, con quien compartía una conexión que trascendía lo común.
Su impaciencia era un rasgo tan característico como su risa contagiosa, y aunque a menudo me encontraba atrapada entre la rutina y el caos del trabajo, siempre hacía lo posible por cumplir con sus deseos.
Becky y yo nos conocimos hace 4 años en un taller donde nos preparábamos para una serie de la que íbamos a formar parte.
Mi vida en ese entonces era un poco aburrida, apagada por las sombras de mi propia depresión aunque siempre llevaba una sonrisa en mis labios. No sabía lo que quería hacer en esta vida. Como siempre, sólo vivía día a día.
Entonces ella llegó como una ráfaga de luz, exótica y encantadora, con una energía que contrastaba y desafiaba la oscuridad que me rodeaba.
Nuestro encuentro fue como un destello en la oscuridad. En medio de las bromas y la lucha constante por mantener el semblante de normalidad y de intentar solucionar nuestras diferencias, descubrí en Becky una chispa que encendió algo dentro de mí.
Lo que empezó como una amistad y compañerismo pronto se transformó en una conexión profunda y visceral. Cada momento con ella se convirtió en una necesidad, un deseo que iba más allá de las meras palabras.
Pasaron algunos años y en un abrir y cerrar de ojos, habíamos logrado tener éxito con nuestros proyectos tanto en pareja como en solitario. Becky siempre estaba ahí para mí; en los buenos momentos y en los malos, especialmente cuando estaba cerca de darme por vencida.
Siempre a mi lado...siempre sonriente.
En ocasiones me encontraba atrapada cuestionando la naturaleza de nuestra relación. Becky, con su brillantez y su manera de tocar la vida, me había sacado de mi zona de confort. Ella era todo lo que yo necesitaba y, en algún nivel profundo, temía que lo que podía llegar a sentir, si me lo permitía, podría cambiar la dinámica de nuestra amistad.
Sólo sé que la quiero en mi vida pero me encuentro en la encrucijada de lo que nuestra relación ha sido hasta ahora y lo que podría llegar a ser.
Aunque no puedo predecir qué pasará en el futuro, lo que sé con certeza es que cada capítulo de nuestra vida juntas será una prueba de que algunas cosas están destinadas a ser.
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¿Amigas o algo más? (FreenBecky)
Fiksi PenggemarLa amistad de Freen Chankimha y Becky Armstrong toma un giro inesperado cuando lo que comienza como una conexión reconfortante y platónica se convierte en un torbellino de emociones intensas y atracción prohibida. ¿Sobrevivirá su amistad o se desmor...