Amor o Capricho

Capítulo 6

-- Bueno, hemos llegado, muchas gracias por aceptar mi invitación Vanessa --

Al voltear, y ver el rostro de Martín, me entraron ganas de contarle lo que pasó aquel día con Jeorge, lo mucho que me afectó y lo que haré antes de que caiga la noche, en el parque, totalmente sola. El impulso de contarle todo era incontrolable al mirarle a los ojos, pero tenía que ser fuerte, tenía que resolverlo por mi cuenta, sin ayuda de nadie.

-- Muchas gracias a ti por invitarme -- le sonreí y el me devolvió el gesto

-- No fue nada, el recibimiento fue algo incómodo pero...-- río -- al final resultó agradable la compañía --

Dió dos pasos hacia mí y por tal acción yo tuve que retroceder la misma cantidad de pasos, al hacerlo, el pareció algo decepcionado, ya que hizo lo mismo y bajó la cabeza.

Nonono, pero serás tonta, aprovecha la oportunidad

Cállate conciencia

-- Bueno...yo me voy, ten lindo día -- fingió una sonrisa se volteó y salió caminando

Me sentía rara por su momentánea reacción, pero no sabía muy bien porque, justo cuando se voltea llamo si atención:

-- Martín! -- le grité

Da media vuelta con una cara de asombro

-- Nos...nos vemos...m-mañana -- no se cómo salieron las palabras, simplemente no sabía que decir

Y él hizo lo que menos me esperé

Se acercó a mí y me dió un beso en la mejilla, del cual no pude escapar ni pude negar porque él no me dio tiempo a reaccionar, solo sé que sentía el calor de su mano en mi espalda y sus labios en mi rostro.

Cuando por fin se separa me doy la oportunidad de volver a respirar, y me mira a los ojos, porque este chico tiene este poder en mi, así uno no se puede concentrar.

-- Nos vemos mañana Vane -- dijo, con su sonrisa característica, tan linda y brillante

Y con ese gesto de voltea y se va, dejándome seguro toda roja como tomate enfrente de mi casa, ojalá no me haya visto mi mamá por ningún lado.

∆∆∆

La escena de esta mañana me revolvía el cerebro, no podía dejar de pensar en ese beso, que podría haber no significado nada, que duró sólo unos milisegundos, que solo fue una forma de despedida, pero que a mí me dejó con mariposas tanto en el estómago como en la mente.

Eso es porque estás coladita por él, como dirían los españoles, y lo sabes, yo lo sé más que tú, pero te empeñas en negarlo, claro.

Realmente, con esta conciencia revolviendome los pensamientos más de lo que ya están, no se puede vivir.

Pero...eso no es lo único que me tiene pensando mucho. Ya son las 6:34pm, y casi llegando a las 8:00pm empieza a anochecer, y me estoy preparando para ir al encuentro -no muy agradable- con Jeorge. No se muy bien qué le diré ni mucho menos qué dirá él. A lo mejor me vuelve a amenazar o tal vez querrá llegar a un acuerdo.

O...te da un palazo por el coco y te lleva a saber dónde y te deja cautiva para él solamente y tú cumpliendo todos sus caprichos y así yo aprovecho para restregarte a cada segundo que fue una pésima idea

De verdad que contigo para qué quiero enemigos

Para eso estoy, de nada

Después de elegir un atuendo no tan abrigado ni tan fresco, salgo de mi habitación y en cuanto voy a abrir la puerta, algo me detiene.