**Semanas después**, Jeff, decidido a enfrentar la situación, dejó la isla y regresó a Aberdale. La escena que encontró fue devastadora: la ciudad estaba en ruinas, con la gente muriéndose de hambre y viviendo en condiciones miserables. La visión de la ciudad decayendo le recordó sus días en Venezuela y reforzó su determinación de hacer algo al respecto.
**—Esto no puede seguir así.** pensó Jeff con determinación. **—Debo encontrar a Sumo.**
Después de una exhaustiva búsqueda, Jeff finalmente encontró a Sumo, pero se sorprendió al ver que llevaba un casco de control mental. Al reconocer la gravedad de la situación, Jeff intentó razonar con él.
**—Sumo, ¡por favor, escucha!** suplicó Jeff. **¡No eres tú, este casco está controlándote!**
Sin embargo, Sumo, bajo la influencia del casco, respondió con hostilidad y le dio una fuerte patada a Jeff.
**—¡Sálte de aquí!** ordenó Sumo, su voz distorsionada por el control mental.
De repente, **Trump salió de las sombras**, su sonrisa maliciosa llena de satisfacción. **—Veo que te has dado cuenta, Jeff. Este ya no es Sumo; ahora él es como mi hijo adoptivo.**
Jeff, enfrentando a Trump, se dio cuenta de que sus habilidades de combate no serían suficientes contra la avanzada tecnología de Trump y el control mental que mantenía a Sumo bajo su dominio. Trump se burló de Jeff con un tono despectivo.
**—No puedes hacer nada, niño con cabeza cuadrada.** Trump se rió. **—Tus esfuerzos son en vano.**
A pesar del desánimo, **Jeff recordó el legado de Clarence: nunca rendirse.** Usando su inteligencia y creatividad, ideó un plan. Encontró una pistola de pulverización alienígena en el equipo de Trump y la usó para disparar al casco de Sumo. La pistola logró desintegrar el casco, liberando a Sumo del control mental.
**—¡Sumo, eres libre!** gritó Jeff mientras Sumo comenzaba a recuperar el control.
Recuperado, Sumo miró a Trump con furia y determinación. **—¡No te lo permitiré, Trump!** dijo Sumo, mientras Jeff y él se unían para luchar contra el tirano.
Trump, al ver que su plan estaba fallando, intentó engañar a Sumo una vez más, pero esta vez Sumo no cayó en sus trucos. Con el apoyo de Jeff, logró derrotar a Trump. Los dos lo capturaron y lo llevaron a prisión, asegurándose de que no pudiera causar más daño.
**—Finalmente, está terminado.** dijo Jeff, con una mezcla de alivio y tristeza.
**—Sí.** asintió Sumo. **—Hicimos lo que pudimos.**
Con Trump encarcelado, **Sumo y Jeff** liberaron a la tribu peruana y trabajaron para reconstruir lo que se había perdido. Una noche, mientras observaban las estrellas, se tomaron un momento para recordar a Clarence y su sacrificio.
**—Siempre lo recordaremos.** dijo Jeff, mirando las estrellas. **—Su legado sigue vivo en nosotros.**
**—Así es.** respondió Sumo, con una sonrisa triste. **—Y mientras tengamos su recuerdo, seguiremos adelante.**
**Fin**.
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'<s>Clarence</s> Temp 2: Los Últimos Sobrevivientes: La Saga de Sumo'
HumorDespués de la trágica pérdida de Clarence y la misteriosa desaparición de Jeff, Sumo se convierte en el único que puede luchar por el bien en un mundo sumido en el caos. Con el dolor de la pérdida pesando sobre él, Sumo se enfrenta a una realidad en...