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capítulo 23.

—¿Qué dices? Me estas mintiendo, recordaría a TaeHyung —Dijo JiMin—. ¡Jamás lo habría olvidado!

—Sin embargo, lo hiciste. Pensé que si te encontrabas con él nuevamente lo recordarías, pero tu lobo ni siquiera reaccionó.

JiMin pensó que su padre se estaba volviendo loco, porque las palabras que dejaban su boca no tenían lógica. Él no había visto a TaeHyung en su vida hasta el primer encuentro en el restaurante donde quedó perdido por el dulce aroma del omega.

—No estoy entendiendo nada —Terminó por decir el azabache tomando con mayor fuerza el cuerpo de TaeHyung entre sus brazos.

—Tu y TaeHyung son destinados. Siempre lo fueron, se conocieron hace años cuando me acompañaste en una de las visitas mensuales —ChanYeol fijó la mirada en su hijo mayor—. Esa es la razón por la que perdiste el control de tu mutación y despertaste a los días después sin recuerdos. El hecho de que te forzaran a abandonar a tu omega desató un descontrol en tu alfa.

—¿Él? ¿Él lo sabe? —JiMin miró detenidamente el rostro del chico sobre sus brazos—. ¿Sabe qué somos destinados? ¿Me recuerda? —Si ChanYeol decía la verdad, eso significaba que TaeHyung sabía quién era JiMin, ¿Era por eso que había aceptado el contrato?

—Aún tengo mis dudas sobre ello. V es el mejor impostor que tenemos, es demasiado bueno en el trabajo por lo que se me hizo difícil desde el principio conocer qué tanto sabía de ti.

—¿Por qué lo hiciste? Si sabías que terminaría perdidamente enamorado de él, ¿por qué demonios lo trajiste a mí mediante un contrato y una identidad falsa? —JiMin quería entender las razones que tuvo su padre detrás de todo el asunto, porque necesitaba saber que tan cierto era lo que le estaba contando—. ¿De qué se trata el maldito contrato?

—En un principio si buscaba infiltrar a un omega cerca de ti para que te protegiera sin ser tan evidente. Sabes que las familias están algo alteradas luego de tu reclamación al liderazgo. Uno de los impostores al servicio de nuestra mafia sería un candidato perfecto, pero cuando comencé a buscar al mejor, terminé llegando al currículum de Kim V —El alfa menor aún no se acostumbraba al verdadero nombre del chico sobre su regazo, la respiración del omega se había regularizado desde que sintió que era su alfa quién lo sostenía delicadamente.

—¿Si TaeHyung formaba parte de la casa de Jiyu cómo llegó a ser uno de los impostores? —Y es que había demasiado que JiMin no sabía.

—Entró como uno de los sujetos de prueba en un inicio donde buscábamos probar su eficiencia, no le costó mucho ambientarse a las situaciones. Cuando vi su foto lo reconocí, su color de cabello y ojos eran distintos, pero si lo mirabas detenidamente podías notar que era aquel omega que te hizo perder la cordura.

—¿Y luego qué? ¿Solo lo obligaste a firmar sin siquiera saber el daño que me harías, que nos harías a ambos? —El alfa se guardó el gruñido que su lobo deseaba soltar.

—Mi intención luego de saber quién era fue acercarlos nuevamente, el contrato solo era un farsa para asegurarme de que V no fuera a huir.

—¡Pudiste decírmelo! Debiste hacerme recordar lo que pasó hace 3 años —Estaba demasiado furioso, si no estuviera con TaeHyung en sus manos estaba seguro que saltaría sobre ChanYeol—. ¡Yo tendría que haberlo sacado de ese jodido lugar!

—Yo lo hubiera hecho de saber que seguía con vida. Luego del incidente con el omega, Jiyu dijo que se encargaría de que no volviera a molestar, sus palabras me indicaron que lo mataría. Y no le tome importancia al ser un omega cualquiera, sin embargo, luego de ese encuentro pasaron días en los que no despertabas, todos los expertos a los que consulte dijeron que se debía a un trauma sufrido por tu lobo al despojarlo de una parte importante de su alma, me di cuenta en ese momento que la razón por la que entraste en celo aquella vez y mutaste de manera descontrolada, era porque aquel omega era tu alma gemela y yo había dejado que muriera.