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capítulo 2.

"EL AROMA DEL DOLOR"

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TaeHyung despertó de madrugada aquel día, desde que se había mudado a la casa central donde vivía la familia líder del clan no lograba dormir del todo bien. Llevaba exactamente dos semanas desde que su relación con JiMin había comenzado, descubrió para su sorpresa que el alfa era poco hablador y tranquilo. Aún recordaba lo reconfortante de su primer encuentro.

Llevaba esperando más de media hora dentro del salón en el que la pareja de betas le señalaron. Pensó que el alfa ya se había adelantado al lugar, pero para su tranquilidad aún no aparecía, aunque luego de unos minutos se preocupó de que algo hubiera pasado.

Decidió mirar los grandes cuadros que adornaban los muros, al instante sintió las puertas moverse y pasos se instalaron tras su persona. Con rapidez dio vueltas sobre sus pies y observó con sorpresa al hombre que ahora decoraba el lugar.

TaeHyung, notó el ejercitado cuerpo de JiMin y esa aura dominante. Se dirigió a pasos lentos a su encuentro con cuidado de no tropezar. Dió una pequeña reverencia como saludo y terminó de acercarse. En su mente estaba listo para cualquier situación, pero el alfa solo lo miraba detenidamente, tal vez le molestaba que fuera un chico.

—Omega —fue lo único que salió de los labios de JiMin.

—Alfa —TaeHyung, respondió de manera cuidadosa, ahora que lo tenía enfrente no sabía cómo actuar, en situaciones normales era el alfa quién comenzaba el contacto, pero el azabache estaba quieto, observando sus ojos con detalle. Confundido el omega llevó su mano hasta uno de sus brazos para llamar la atención, la actitud del chico era desconcertante.

—Lo lamento... Soy Park JiMin. Perdona mi demora, mi intención no era llegar tarde a nuestro encuentro, espero que el lugar haya sido de tu agrado. Padre dijo que por esta ocasión solo seríamos los dos. —El chico asintió y el alfa nuevamente vio como algunos cabellos se desacomodaban por su rostro, las yemas de sus dedos cosquilleaban buscando el contacto. Su olor era increíble, se abstuvo de preguntar si estaba usando inhibidores o no.

Solo tócalo.

"Silencio lobo estúpido" JiMin respondió a su interior en un intento de apaciguar la situación. No entendía qué sucedía con su lobo y no solo esté, su parte humana y racional deseaba estar aún más cerca del chico frente a él, el olor lo estaba volviendo loco, era dulce y suave, pero al mismo tiempo refrescante como una bocanada de aire frío que le penetraba el alma.

—Soy Kim TaeHyung, es un placer conocerlo mi señor —Como el omega no tenía claro el término apropiado para dirigirse al alfa opto por algo que le sería natural a ambos.

—No es necesaria la formalidad, serás mi esposo. Solo dime como te sea más cómodo.

Si lo planteaba de esa forma a TaeHyung se le ocurrían un montón de apodos cariñosos y emocionantes que hicieran que el alfa se sintiera satisfecho, pero tal vez este alfa no era como todos así que simplemente lo llamó "Alfa".

Debía amar y proteger a ese hombre por lo que daría lo mejor de sí. Platicaron de temas triviales esa noche y cuando la velada terminó ambos se dirigieron a la mansión Park. La mafia Park se encontraba instalada en la ciudad de Yeosu, una península rodeada de frondosos bosques los que fueron destinados a esconder las enormes inmediaciones de su enorme domicilio, alrededor de 3 pisos con ventanales de cristal bordeando el contorno de la lujosa y moderna mansión principal. En silencio recorrieron los pasillos, por instantes sus manos chocaban de manera delicada, el ambiente se nutrió de una cálida sensación.

—Antes de la boda tendremos habitaciones separadas, si necesitas algo más solo pídelo, esta casa se encuentra a tu disposición. Generalmente suelo estar en el último piso, habrán algunas reuniones y eventos dónde deberás acompañarme. Solo quería decirte que puedes irte en cualquier momento.