Tenerte Cerca (NCT!MarkHyuk)

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POV MARK

"¿Qué? ¿Y Qué hay de mí, hyung? ¿Me estás engañando?" Se escucha la melodiosa voz de su vocalista principal, bromeando como siempre con la ship que los fans les han asignado. Un escalofrío le recorre la espalda de solo imaginar el escenario, la obra de teatro sucede en segundos frente a sus ojos, un Haechan celoso haciendo puchero porque ha visto a su novio hablar de otra (la otra en este caso siendo miles de NCTzens). La fantasía no dura mucho, y su cuerpo casi por inercia reacciona con un buen practicado gesto de disgusto y repulsa, como hace siempre para rechazar cualquier insinuación de ese tipo de parte de Haechan, porque no puede permitir que las cámaras capten lo que realmente pasa por su mente cada que lo tiene cerca.

Su crush con Haechan lleva más de un año, pero hace 4 meses, todo empeoró. Lo que era algo imposible y nada más que una fantasía resultó ser enteramente posible y solo cuestión de tiempo cuando sin preguntar se dio cuenta de que no es el único miembro queer del grupo.

Porque eso lo cambia todo, saber que el menor comparte su gusto por los hombres lo saca de la lista de amigos hetero a los que no debe ni mirar y lo mete automáticamente en la lista de potenciales parejas, sin permiso suyo. Y le cuesta mucho tratarlo con la cercanía de siempre mientras internamente lo único que quiere es conquistarlo, porque ahora sabe que se puede, que si lo intenta, probablemente tenga éxito, que quizá incluso ya el gusto sea mutuo.

Y es ese pensamiento el que finalmente lo detiene, el pensar que solo porque el contrario es gay, que automáticamente gusta de él. Le da vergüenza pensar así de descaradamente, estar mal interpretando lo que para el otro son tratos entre amigos, bromas, fan service. Es ahí cuando tenerlo cerca pero no como él quisiera, da paso a un sentimiento incómodo.

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Lo primero que vio fue la sombra de alguien parado frente a la puerta de su habitación compartida, y se quedó en la cama esperando que entraran sus miembros o que un manager tocara, pero nada de eso pasó. Un nerviosismo lo atacó de pensar que eran saessangs y con miedo se acercó a revisar por la mirilla, viendo que se trataba de un apenado Haechan perdido en sus pensamientos.

Abre la puerta y preocupado le pregunta al menor si todo está bien, invitándolo a pasar para que hablen, luego de recibir una afirmativa.

Se le notan los nervios, y no es capaz de articular muy bien lo que vino a decir, los ojos del más joven recorren toda la habitación, evitando los suyos, y todo ese acto de timidez que rara vez se ve en alguien tan extrovertido se le antoja de lo más tierno. Cuando por fin dice algo sobre la ship y las bromas, Mark cree entender por dónde va la idea, pero le pide mayor claridad, solo para sentir como su estómago cae a sus pies cuando el otro pregunta, con un nudo en la garganta "¿Te doy asco?".

¿Pero qué clase de tontería es esa? Mark se apresura a negar tal idiotez tan pronto como recupera el orden de sus pensamientos. Un comentario de odio ¿Quizá? Se pregunta qué le metió a su amigo esa idea a la cabeza.

Es después de la pregunta de Haechan, sobre por qué se ve que con Yuta no es igual, que se da cuenta de lo que ha dicho en voz alta, ha admitido ese sentimiento de incomodidad que lo ataca de vez en cuando. Al parecer no tenía sus pensamientos tan ordenados como pensó, quizá es la vulnerabilidad del siempre alegre sol que tiene enfrente que lo desarma, lo desubica, y lo hace decir cosas que sabe que no vienen al caso.

"Él no es gay" admite, no sabiendo cómo el otro tomará la admisión. Se apura a aclarar que no lo estaba espiando, que no le ha dicho a nadie más, que no le molesta en lo absoluto, que él también es bisexual, que la incomodidad no es asco sino anhelo y esperanzas, y lo dice en inglés, no sabiendo cómo articular en coreano ese sentimiento de querer algo tanto como lo quiere a él, y de sentirlo tan cerca como lo tiene a él, sin que realmente sea tuyo.