Al día siguiente, me desperté con esa sensación extraña en el estómago, como si algo fuera a suceder, aunque no sabía exactamente qué. Me preparé para ir a la escuela, tratando de no pensar demasiado en Rex, aunque era casi imposible. Llegué a la escuela como siempre, con los audífonos puestos y la música a todo volumen para distraerme de mis pensamientos.
Caminaba por los pasillos, sin prestar demasiada atención a mi alrededor, cuando de repente sentí que algo se atoraba en mi zapato. Antes de darme cuenta, ya estaba tropezando y, para mi horror, caí al suelo, justo frente a... ¡Rex!
Mi cara se puso roja al instante, y la vergüenza me invadió por completo. No podía creer que esto me estuviera pasando, y peor aún, justo en frente de él. Me quedé ahí, en el suelo, con la mirada fija en sus zapatos, sin saber qué hacer o decir. Pero entonces, algo inesperado ocurrió.
Rex, con su voz suave y amable, me dijo: "¿Estás bien?" Y antes de que pudiera reaccionar, me ofreció su mano para ayudarme a levantarme. Era la primera vez que escuchaba su voz tan de cerca, y por un segundo, todo lo demás desapareció. Tomé su mano, sintiendo un cosquilleo en mi estómago, y él me ayudó a ponerme de pie.
-Sí, gracias- respondí ,fue lo único que logré decir, mi voz apenas un susurro. Aún estaba en shock por lo que acababa de pasar. Rex me sonrió, una sonrisa que hizo que mi corazón latiera aún más rápido, -Ten más cuidado la próxima vez-dijo con esa voz tan tan irresistible Luego, se giró y continuó caminando por el pasillo como si nada hubiera pasado.
Me quedé allí, paralizado, viendo cómo se alejaba. No podía creer que acababa de interactuar con él, y mucho menos de esa manera. Mi corazón seguía latiendo con fuerza, y mi mente estaba a mil por hora. Había tantas cosas que quería decirle, pero en ese momento, todo lo que podía hacer era quedarme ahí, tratando de procesar lo que acababa de suceder.
Justo cuando Rex se alejaba, tratando de calmar los latidos acelerados de mi corazón, escuché una risa familiar que me hizo volver a la realidad de golpe. Me giré y vi a Samy acercándose, riéndose a carcajadas como si acabara de presenciar el momento más gracioso del año.
-Foxy, esa caída fue épica-exclamó, con los ojos brillando de diversión. "Parecía algo sacado de una comedia,- ¡no puedo creer que te hayas caído así!-
Antes de que pudiera responder, Axen apareció detrás de ella, con una expresión mezcla de sorpresa y risa contenida.-¡Por Dios, Foxy! Qué vergonzoso, ¿cómo te las arreglas para hacer estas cosas en público?- dijo aguantándose la risa
Yo, todavía sintiendo el calor en mi cara por la vergüenza, me encogí de hombros y traté de sonreír, aunque sabía que mi rostro estaba tan rojo como un tomate. -Ya sé, soy un desastre andante,-dije, intentando sonar despreocupado, pero la vergüenza todavía me estaba comiendo vivo por dentro.
Samy no podía parar de reírse, y se agarró el estómago mientras me miraba. -¡En serio, Foxy! Si hubiera habido un juez, te habría dado un diez por esa caída tan dramática.-
Axen, aunque un poco más seria, no pudo evitar unirse a la diversión. -Sí, pero vaya forma de empezar el día, ¿no? Espero que no te hayas lastimado... aunque no puedo decir que fue una gran primera impresión para quien sea que estuviera mirando.- dijo sonriendo
Lo que ellas no sabían era que el -quien sea- era Rex, el chico que había ocupado mis pensamientos durante tanto tiempo. Ya se lo que dirán "que cursi " pero déjenme que es mi historia y la cuento como se me pegue la gana .pero aunque la situación fue increíblemente embarazosa, tampoco podían saber que, en medio de esa caída, algo había cambiado. Porque por primera vez, aunque de la manera más desastrosa y estúpida posible, había interactuado con él, y eso, para mí, ya era un gran milago, es decir ¿cuántas veces caes en los pies de él chico que te gusta ?
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Más que amigos (MF)
RomanceNo sé si debería estar escribiendo esto, pero necesito sacar lo que siento, aunque solo sea para mí mismo.(foxy) Síganme en mi canal de youtube me encuentran como FoxMister pero díganme MisterFox