𝐏𝐮𝐞𝐫𝐭𝐚 𝐝𝐞 𝐞𝐦𝐞𝐫𝐠𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚

Ella

Marcus:

Nos miramos y sentimos en latir de nuestros corazones acelerándose

Me tomó por sorpresa cuando me abrazó

Ella pasó sus antebrazos por mis hombros y me apretó contra ella

Noté que no llegaba muy bien y me agaché un poco

Ella hundió su cara en mi cuello y noté como aspiraba mi olor

-hueles tan bien

En el momento en el que dijo eso mis manos fueron a su cintura

Y la abrace también

Con una de mis manos acaricie su pelo pero ella se separó de repente

-¿por qué  eres tan bueno conmigo?

-es mi deber señora

-no me llames señora

-¿como quiere que la llame?

-llámame Grace
Asentí

-perfecto- dije sonriendo

Ella se acercó más a mí, se acercó de una manera muy peligrosa

Puse mis manos en sus caderas y me miró a los ojos, unos ojos de súplica, pasó sus manos por mi torso, ambos nos estremecimos ante el tacto de otro

Ella se fue acercando más a mí, yo me incliné un poco
Sus labios se quedaron a centímetros de los míos

Y de repente

-¡En pie Angelo!

Todo había sido un sueño

Y ahí estaba el guardia levantándome del sueño tan maravilloso

El día iba pasando y yo seguía pensando en ese sueño

Fue tan real..

Creía haber sentido a la señora en mis brazos
Y si, ese era realmente mi sueño
Ese día me tocaba cocinar a mi
Mientras cocinaba solo podía pensar cuando la señora me había dicho que para ella era el mejor chef

El recordar esas palabras solo me causaba una cosa
Dolor, saber que fue pasajero y que ella se había follado a ese gilipollas

Preparé la comida favorita de la señora

Pasta Alfredo

Llame a todos a comer y bajaron
La señora al ver lo que había preparado sonrió y se acercó a mí para darme las gracias

-Gracias Angelo
-No es nada señora
-¿ya no estás enfadado?
-nunca estuve enfadado
-¿ah no?
-no señora, lo que estaba era decepcionado
-¿decepcionado?
-si, totalmente decepcionado
-oh...
Termine de comer y me fui de ahí

Noté a la señora algo triste durante el día pero realmente, se lo merecía

La vi saliendo de la mansión en la que estábamos ahora

Salió para verse con Mario
Vi como él se acercaba, estaba a punto de besarla pero ¿ella?

Ella se apartó y entró a la mansión de nuevo