-¿Desea que le sirva más té?-Preguntó la mujer recibiendo la taza vacía.
-No, muchas gracias-Tobby, se acercó al piano y tocó unas teclas-Magnífico todo y conozco la melodía indicada para una hermosa mujer sureña.
-Me encanta escuchar eso-Rió animada.
Estábamos espiando desde la ventana, cuando bandido se cruzó por la ventana, persiguiendo al gato y desordenando todo a su paso.
-Ay no-Nos miramos entre los tres.
-¡Bandido!-Exclamó Tobby sorprendido.
-Cielos.
-¡Largo de aquí, bandido!
-¿Ese perro es suyo? Ese perro es suyo ¡¿Verdad?!
-No es mío, es de un amigo.
El lugar era un desastre, mientras ellos discutían bandido seguía tratando de agarrar al gato y nosotros preferimos quedarnos en nuestro lugar.
-¡Fuera!¡Fuera de mi casa!
-¡Por favor, no es mi perro!
-¡Largo! ¡Largo de mi casa!
-Salgamos de aquí o nos va a a ver-Nos alejamos de la ventana despacio.
-Me siento culpable-Albert miró el suelo.
-Vayamos con Tobby-Caminamos con la cabeza gacha-Lo sentimos, Tobby.
-Fue nuestra culpa-Lo mire avergonzada.
-No quisimos arruinarlo todo-Agregó Albert-Lo juro.
-No tiene importancia -Recibió el sombrero que la señora le arrojo y que Albert recogió de la tierra-Hijos míos.. todo es porque insisto en hablar con una piedra. Lo mejor será que me vaya de la ciudad-Se fue desanimado.
-Pobre Tobby.
Al día siguiente, termine mis labores para ir con Albert y Laura. Los chicos decidieron traer a Grace con nosotros y la verdad la idea no me desagradaba para nada, la pequeña era muy tranquila y dulce.
ESTÁS LEYENDO
Little house on the praire (Albert Ingalls y Cassandra Cameron)
FanfictionLlevo la mitad de mi vida en el pueblito llamado Walnut Grove junto con mi madre. Es un lugar muy hermoso y con personas increíbles...Desgraciadamente eso fue hasta que un día nos tuvimos que marchar junto con nuestros amigos hacia la ciudad. Pero n...