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Taehyung se despertó a la mañana siguiente con una sensación de irrealidad pesando sobre su pecho. La luz del sol se filtraba a través de las cortinas de su habitación, pero en lugar de la calidez habitual, la claridad del día parecía desvelar el caos que se había desatado en su vida. A su lado, Jimin dormía en un sillón, su rostro relajado pero con las cejas ligeramente fruncidas, como si incluso en su sueño, compartiera la preocupación de Taehyung.

No podía quedarme en la cama por más tiempo. Con cuidado para no despertar a Jimin, se deslizó fuera de las sábanas y se dirigió al baño. Se miró en el espejo, observando el reflejo de su rostro pálido y sus ojos hinchados por el llanto. Colocó una mano sobre su abdomen, tratando de imaginar que dentro de él crecía una vida, una vida que nunca había planeado ni deseada.

Un nudo se formó en su garganta, y tuvo que respirar hondo varias veces para no desmoronarse otra vez. Sabía que hoy sería otro día difícil, pero también sabía que debía enfrentarlo. No tenía otra opción.

Después de una ducha rápida, salió del baño y encontró a Jimin despertando, estirándose en el sillón.

—Buenos días, Tae —dijo Jimin con una voz suave y ronca por el sueño. Sus ojos se abrieron lentamente, enfocándose en su amigo—. ¿Cómo te sientes?

Taehyung se encogió de hombros, inseguro de cómo responder.

—No lo sé, Jimin. Es como si todo esto fuera un sueño extraño del que no puedo despertar —respondió, sentándose al borde de la cama—. Pero no lo es, ¿verdad? Esto es real.

Jimin ascendió, poniéndose de pie para acercarse a Taehyung. Se agachó frente a él y tomó sus manos.

—Sí, es real, pero no tienes que enfrentarlo solo. Hoy volveremos a la clínica, y el doctor Kang, y el doctor Bang nos darán respuestas. Después, podrás decidir qué quieres hacer.

Taehyung presionó las manos de Jimin, sintiendo un poco de alivio en el calor de su contacto.

—Gracias, Jimin. No sé qué haría sin ti.

—No tienes que agradecérmelo, Tae. Sabe que siempre estará aquí para ti —respondió Jimin con una sonrisa tranquilizadora.


🍃🍃

El viaje de regreso a la clínica fue silencioso, ambos inmersos en sus pensamientos. La preocupación estaba grabada en el rostro de Jimin, pero no dijo nada, respetando el espacio que Taehyung necesitaba para procesar lo que estaba sucediendo.

Cuando llegaron, fueron recibidos nuevamente por la recepcionista, quien los guió a una sala privada. El ambiente era tenso, pero Jimin mantuvo una mano sobre el hombro de Taehyung mientras esperaban.

El doctor Kang entró después de unos minutos, con una expresión más seria, y junto a él, venía el doctor Bang, quien se sentó frente a ellos, cruzando las manos sobre la mesa.

—Taehyung, Jimin, gracias por venir hoy. Me temo que lo que voy a explicarles es bastante complicado, pero necesito que me escuchen con atención —comenzó el doctor Bang, mirando a ambos con empatía.

Taehyung sintió que su corazón se aceleraba, y su agarre en la mano de Jimin se fortaleció. Asintió, dándole al doctor la señal para continuar.

—Después de revisar todos los registros y hablar con mi equipo. —Hizo una breve pausa para mirar a un muy arrepentido doctor Kang.  —Descubrimos que hubo un error administrativo grave durante tu última visita, Taehyung. De alguna manera, fuiste registrado como un paciente que debía someterse a una inseminación artificial en lugar de un chequeo rutinario. No puedo expresar cuán apenado estamos por esto, ya que claramente no era lo que debió haber ocurrido.

El Omega Virgen | JinTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora