En una época donde la dureza de las normas sociales y las tradiciones oprimen a los corazones que no encajan, una historia de amor se desarrolla entre las sombras, como una luz que brillaría demasiado fuerte en un ambiente ciego.
La inocencia de su amor y la pureza de sus corazones no pueden ser apagadas por la fiebre de los juicios y el código inflexible de los ojos en el pueblo. En esa inquietante soledad, Jocelyn y Claudia encuentran consuelo en sus propios corazones, sabiendo que la fuerza de su amor es innegable, inmutable y que no puede ser alterada por las presiones de un mundo cerrado.
Pero el amor tiene una fuerza propia, y su deseo de estar juntos y vivir su amor sin vergüenza ni temor siempre choca contra los muros del secreto y la mentira.
── ¿Y ese pinche, Clau? ── preguntó Marcela, que veía a su amiga con una parte de su pelo tomado por un pinche de color verde.
── Nada, solo quería ponerme algo nuevo hoy día, pero que tampoco se note tanto. ── respondió Claudia con tranquilidad, sabía que a veces las monjas del colegio podían ser muy estrictas con algunas cosas, la idea era no llevar algo tan llamativo.
── Te queda bien, pero el verde no es tu color. ── soltó una risita, viendo cómo Claudia le mostraba una mueca de molestia pero igual se divertía.
── Te ves linda, Clau. ── Jocelyn no dudó en hacerle un cumplido, siendo transparente con sus palabras.
Claudia y Jocelyn se miraron en silencio, ambas con una ligera sonrisa como si se estuvieran diciendo algo con sus miradas y gestos. Marcela, ajena a todo lo que sucedía entre ellas, quedó algo curiosa.
── Gracias, Jocelyn. ── pronunció con una sonrisa nerviosa, ignorando un poco su alrededor.
── Oigan, me voy ya, las demás se están entrando y no quiero que me reten de nuevo. Chao chiquillas. ── las dos mujeres se despidieron amablemente de su amiga, ella se levantó con cuidado del poco césped que había y se fue caminando con calma, yéndose a su aula.
Ambas chicas se miraron y rieron, empezaron a hablar, olvidando por completo ese tema que las perseguía y atormentaba. Las dos permanecían allí, con las miradas entrelazadas como los rayos de sol a través de los árboles.
El tumulto era fuerte pero ellas no lo percibían, Jocelyn le cantó un pedacito de una canción de la banda favorita de la pelinegra, Kiss. Y para Claudia, parecía que podía curar todos los males del mundo.
Las dos estaban juntas, en un lugar sagrado y mágico. Hasta que surgió de nuevo ese tormentoso y temido tema.
── Oye Claudia, ¿No te gustaría que podamos amarnos libremente? Digo, ser oficialmente algo más, sin tener que escondernos. ── habló suavemente la de ojos verdosos.
── No, eh... Jocelyn, ¿No podemos hablar eso después? Ahora estamos en el liceo y-
── ¿Después cuando? Solo vas a seguir atrasando este tema más y más, hablémoslo. ── quería resolver todo ese asunto, no quería seguir escondiéndose.
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𝗦𝗲𝗴𝘂𝗶𝗿 𝗦𝗶𝗲𝗻𝗱𝗼;; Jlaudio
Fanfiction:: "Yo no quiero a alguien como el, yo lo quiero a el" ❛𝐏orque las cosas que se rompen Nunca vuelven a existir.❜ One shots Jlaudio 🤓