Jimin y La Bestia

Capítulo 24

Si jungkook dijera que no estaba preocupado estaría mintiendo, a jimin le creía por días la barriga, sólo habían pasado tres meses y ya parecía que estaba a punto de dar a luz.

Era más que obvio que no era normal, pero no podían hacer más nada que esperar, aunque jimin le aseguraba que se sentía bien, él sabía que no lo estaba.

Ahora se veía más cansado y había bajado mucho de peso. Tenía que estar todo el tiempo acostado ya que se cansaba con facilidad.

-Se que te preocupa, a todos nos preocupa. Pero no resuelves nada poniéndote así.

Soyeon estaba frente a jungkook, ambos en la biblioteca.

-Se que todos se preocupan por él pero no es lo mismo.

Jungkook seguía buscando en los libros más antiguos que tenían haber si había alguno que dijera algo sobre bebés entre humanos y Vampiros.

-Por dios se que no es lo mismo, pero ahora tienes que transmitirle paz, tranquilidad, que sepa que todo va a salir bien.

Jungkook se dejó caer en el suelo.

-Tengo miedo.

Logró decir sintiendo un nudo en la garganta. Soyeon lo miró sorprendida, nunca antes lo había visto así.

-Hey, todo va a salir bien.

Soyeon se agachó a su lado y comenzó acariciarle el pelo.

-No quiero perderle.

-Y no lo harás, ya verás que debe ser normal que el bebé crezca tan rápido, después de todo es una mezcla rara.

Soyeon le sonrió intentando subirle el ánimo.

-No se que me pasa estos días, ando demasiado sensible. Si los vampiros pudiéramos llorar me la pasaría el día entero llorando.

Jungkook esbozó una pequeña sonrisa y se puso de pie siendo seguido por Soyeon.

-Es normal, que las personas digan que eres una bestia por no conocerte, pero no significa que en verdad lo seas. Si conocieran el jungkook que todos aquí conocemos verían qué eres una masita.

Jungkook sonrió.

-Ahora ve y dale mimos al embarazado que anda molesto porque hace minutos que no te ve.

Jungkook se coló por la ventana como era costumbre.

-Hasta que al fin decides aparecer.

Jimin hizo un puchero mientras cruzaba los brazos por encima de la abultada barriga.

-Perdón, estaba viendo algunas cosas.

Se sentó a su lado y llevó una mano a la pancita qué estaba descubierta.

-Te extrañé.

-Sólo me fui por unos minutos.

Jungkook comenzó a repartir besos por toda la zona.

-Igual te extrañé, y el bebé también.

-Ya pensaste en un nombre?

-Aún no, es demasiado difícil.

-Ven aquí, mi bebé.

Jimin se corrió a un lado para que jungkook se acomodara. Apoyo su cabeza en el pecho del mayor.

-Cómo crees que será?

Jimin llevó una mano a su vientre dejando suaves caricias.

-Lindo como tú.