Historias para Shippear pilotos de la F1

Yukierre

En un parque con grandes árboles que protegen y refrescan a Yuki Tsunoda de los rayos del Sol mientras pasea en scutter, a unos cuantos metros adelante, vio a un chico caminando distraído que no se dio cuenta cuando se le cayó un billete, Yuki pensó por un segundo quedárselo pero su amabilidad se lo impidió así que lo recogió y se agarró de la mochila del joven para detenerlo.

-Amigo, se te cayó ésto.- dijo sin más, dándoselo en la mano y continúo patinando.

Aquél chico miró confundido el acto pero no le tomó importancia, siguió sobrepensando deprimido por los recuerdos de su exnovia que recientemente lo había terminado, su madre preocupada por él, lo mandó a comprarse algo que le gustara y él sólo pensó en el helado que venden en el parque a una cuadra de su casa.

-Uno de nuez con mantequilla.- pide Pierre.

-Lo siento, se me terminó.- se disculpa el heladero.

-Oh...

-Toma el mío- ofreció Yuki quien había pedido la última bola, -no lo he lamido, se me antojó mejor el de choco-menta.

-Gracias...- dijo dudando al tomar el helado.

Yuki notó su mirada algo extraña como si se tratara de un zombie, Pierre estiró su brazo para pagarle.

-Oh, no, te lo regalo.

-Bueno...gracias...- y se dio la vuelta para marcharse.

-Pobre chico- habla el heladero, -parece que estuviera apunto de llorar.

Yuki mira preocupado hacia donde caminaba Pierre.

"Ni siquiera quería un helado...bueno, al menos fue gratis..."- suspira -"Éste también era tu helado favorito... ¿Qué es lo que hice mal? ...Se está derritiendo... ¿No te di la atención suficiente?"- lame el helado -"Mmh...prefiero el de vainilla..."- lo tira al bote de basura, inconscientemente presintió hacerlo al detenerse ahí.

-¡¿Por qué lo tiras?!- Pierre es sorprendido por Yuki quien lo siguió. -¡Pagué por él! Si lo ibas a tirar no te lo hubiera dado, ahora págame lo que me ibas a dar.

Pierre se sorprendió. -Lo siento...- le da el dinero.

Yuki lo sigue viendo extraño y preocupado. -Olvídalo, ¿por qué lo hiciste?

-Yo...- mira el billete en su mano y lentamente lo guarda en su bolsillo del pantalón, -no lo sé...sólo ya no me gustó su sabor...- respondió cabizbajo.

Yuki se acerca más a Pierre para mirar su rostro. -¿Te puedo ayudar en algo?

Pierre lo ve directamente a los ojos, a esos ojos brillantes y rasgados con largas pestañas, esos lindos ojos tocaron su corazón. Dió un paso atrás desviando la mirada. -Estoy bien.- y repentinamente volvió a recordar por qué se sentía mal.

Yuki se tocó un codo algo apenado por el chico, no tiene la suficiente confianza para preguntarle sobre su vida pensando que sería muy imprudente y mal educado siendo un total desconocido.

-Lo siento, tengo que irme.- Pierre quiso regresar a su casa para volver a encerrarse en su habitación y llorar, sintió una presión amarga en el pecho y le dio vergüenza que Yuki se diera cuenta que sus ojos se volvieron cristalinos.

"¿Por qué me pasa ésto? Quiero olvidarte pero todo me recuerda a ti... Los ojos de aquél chico...wow...en verdad eran los ojos más bellos que jamás he visto...pero...tu recuerdo volvió a mí como una maldición, tu mirada era la más linda que vi antes y me duele no volver a verlos jamás, ¿sabes qué es lo peor? Que cuando vi los ojos de aquél chico, sentí lo mismo cuando miré los tuyos por primera vez...debo estar volviéndome loco, por un momento pensé en regresar a platicar con él, creo que tu partida me está afectando demasiado que al querer olvidarte rápidamente quiero salir con la primera persona que se me cruzó...¿Será soltero? Dios, ¿en qué estoy pensando?"- se cubre la cara con sus manos sintiéndose confundido.

Ensimismado en sus pensamientos, no se da cuenta que estaba por cruzar la calle y aunque no pasaban muchos carros, en ese momento intentó frenar uno para detenerse a tiempo antes de atropellarlo. Pierre escucha el arrastre de las llantas y es jalado hacia atrás rápidamente por Yuki.

-¡¿Estás bien?!

Su corazón late fuertemente. -Sí...

-¡¿Estás demente?! ¡¿Cómo se te ocurre atravesar sin fijarte?! ¡¿Eres estúpido o qué?!

Pierre lo abraza. -Lo siento...- y el nudo en su garganta se desató, el susto sacó los sentimientos que traía guardados, lloró escondiendo su rostro en el pecho de Yuki.

-¡¿Están bien?! ¡Llamaré a una ambulancia!

Yuki alzó una mano diciéndole al conductor que no hacía falta y dudoso acarició a Pierre conmovido.

Sentados en una banca del paque, Pierre le contó sus penas a Yuki. -En serio te agradezco demasiado por preocuparte por mí. No sé cómo pagarte, ¡literalmente acabas de salvar mi vida!

-Mmm...podrías comprarme otro helado.

Pierre busca el billete pero no lo encuentra. -Creo...creo que lo perdí...- lo mira apenado.

-Torpe- se burla dándole un ligero golpe en el brazo.

Pierre sonríe. -Mmm...puedo invitarte uno mañana.

-Okay.

-¿Me das tu número? Me llamo Pierre, por cierto.

-Soy Yuki.- se pasan contactos y se despiden. -¿Estarás bien?

-Sí, ya me siento mejor, no te preocupes, vivo cerca de aquí.

-Bien, nos vemos.

Llegando a casa, Pierre avisa su llegada.

-Te ves contento- se alegra su mamá, -sabía que un poco de aire te haría bien, ¿qué pasó para que llegarás así?

-Conocí a alguien...- sonríe recordando todo lo que pasó.

-Me alegro por ti, invítala a la casa para conocerla.

-Sí, pensaba hacerlo.- recibió un mensaje en su celular. -¡Oh! Es él.- sube las escaleras emocionado.

-¿"Él"?

Fin.