𝕋𝕌, 𝕐𝕆 𝕐 𝔼𝕃 // JASON x CONNER x TIM

ℕ𝕆𝔹𝕆𝔻𝕐

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𝕋𝕌, 𝕐𝕆 𝕐 𝔼𝕃

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Cuando llegaron a casa de los Kent, fue Lois quien abrió la puerta y los hizo entrar a todos mientras intercambiaban saludos estándar, había un poco de gente en la entrada pero eso no impidió que Lois pudiera echarles un buen vistazo a los tres primero.

-Es muy amable de tu parte finalmente venir a visitarnos. -Lois frunció el ceño suavemente, pero sonrió y tomó el rostro de Kon entre sus manos para apretarlo con cariño-. Te has estado cuidando, ¿no es así?

-¡Por supuesto que sí, Lois! -insistió Kon.

-¿Qué fue eso? -preguntó Lois, levantando bruscamente una ceja.

-¡Mamá! -corrigió Kon con una risa nerviosa-. Obviamente, dije mamá.

-Eso es lo que pensé. -Lois tarareó y sonrió antes de tomar a Kon en sus brazos lo mejor que pudo, ya que era mucho más alto y fornido que ella-. Es tan bueno verte.

"Je, no estuve fuera tanto tiempo", dijo Kon, pero parecía completamente complacido de estar en los brazos de Lois y Jason podía sentir el amor paternal y ver a Kon así le provocó una punzada de felicidad en el corazón. Era lindo como un niño pequeño que finalmente recuperó a su madre y Jason trató de ocultar una pizca de envidia porque estaba feliz de que Kon pudiera tener eso ahora que sabía más sobre su pasado.

-Mmm, está bien, ven aquí Timothy -dijo Lois después de darle a Kon un último apretón y antes de que Tim pudiera decir o hacer algo, Lois agarró su muñeca con los ojos en blanco y lo abrazó tal como lo había hecho con Kon.

-Je, a mí también me alegra volver a verte, Lois. -Tim se rió, pero estaba preparado para ese trato y no pudo evitarlo, se derritió un poco, sintiendo sus brazos protectores a su alrededor. Siempre era tan agradable ver a los Kent.

-¡Mírate! -dijo Lois después de apartarse y sujetar el rostro de Tim entre sus manos, apretándole las mejillas-. ¡Te ves mucho mejor que la última vez que te vi!

-Sí, bueno, Jason se niega a dejarnos pasar mucho tiempo sin comer ni dormir -se rió Kon-. ¡Nos enseñó a hacer pasta! ¡Desde cero! Y la última vez ni siquiera hicimos un desastre tan grande.

-Fue un desastre -dijo Tim, alejándose de Lois.

-Dije que no tan grande -se defendió Kon.

Lois se rió entre dientes y miró a Jason, que intentaba no ponerse rígido bajo su mirada. Era una mujer feroz que él sabía que nunca se acobardaba ante nada y también era claramente alguien con mucho amor y cariño. Quería causar una buena impresión en alguien considerada la madre de Kon, quería ser digno del amor de Kon.

-Je, no sé qué opinas de los abrazos... -preguntó Lois, dejándole la decisión a Jason, pero ahora Jason estaba visiblemente tenso-. La próxima vez -sugirió para tranquilizarlo.

-Sí, lo siento... -dijo Jason torpemente, frotándose la nuca.

-Le toma un minuto acostumbrarse al tacto -le dijo Tim a Lois, mirando a Jason con adoración-. Solo dale un poco de tiempo.

-¿De qué estás hablando? A Jay le encanta el tacto -preguntó Kon desconcertado, deslizándose hacia Jason para rodear su cintura con un brazo y presionarse contra él para mirarlo-. Me dejaste sujetarte bastante rápido.