Un deseo fugaz

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Narra bratt

Me dirijo al departamento después de dejar en claro mi punto de vista del rompimiento.

En la otra vida quede como un machista y rencoroso novio, sí lo fuí pero fue al inició, con gema aprendí a dejar mi lado machista y ¿Rencoroso? ¡Por favor!, pasado pisado. Me molestaba que después la gente me tuviera como el ardido, cuando era feliz en mi matrimonio, ese fue más que algo conveniente, me case por amor a gema lancaster.

El sonido de mi celular me saca de mis pensamientos, lo reviso y veo que es el número de la central de  Rusia.

– Adán, avísale a Oliver que se alisten, solo llegaré a vestirme y agarrar las maletas – le comento

– sí señor....

Agarro mi celular,  marcó a la central, el sonido de la llamada se presenta...

– Se está comunicando a la central de Rusia...

– Soy bratt Lewis, capitán de la central de Londres, busco al General Morvius.

– El General se encuentra en una misión, ¿Le dejara algún mensaje?...

– no, de hecho...¿ Podría darme información de la Teniente Gema Lancaster?...

–  No hay ninguna Teniente con ese nombre...

– una disculpa, me refería al   Sargento Gema Lancaster...

– La Sargento se encuentra en una misión con el General Morvius, ¿Desea dejar un mensaje?...

– No, solo... solicitar que me mantengan avisado de  cualquier informe de la Sargento Lancaster.

– Por supuesto, Capitán Lewis.

La llamada termina y observo la carretera por la ventana...

–Estuve en una misión de rescate con el General Morvius, él fue quien me dió la carta que me faltaba para subir a teniente, la verdad, jamás quise ser parte de la milicia, pero ese día fue el más feliz de mi vida porque sabía que lo estaba haciendo bien...

Cuando me encuentre con Gema, buscaré la forma para que deje la FEMF, la apoyaré a seguir su sueño de repostera.

Si lo quiere podrá obtener un trabajo de oficina o la ayudaré a poner su negocio.

–Solo entre porque mi madre me presionaba, siempre quise poner una repostería pero me dijo que eso no era un logró, solo un capricho que no me serviría de nada.

En ese momento deteste tanto a su madre por llenarla de inseguridades, y aún más a Christopher por hacer que estás crecieran.

– papi, me gustan los pasteles de mamá/ a mí las galletas de chocolate...

Siento las lágrimas llenar mis ojos, mi pecho se oprime.

– hice este pequeño budín para que comas mientras terminas el papeleo...

Pongo mi mano en mi pecho tratando de regular mi respiración.

– señor...

– te amo tanto, señor Lewis / mis pequeños Evangeline...

– ¡Señor! – el llamado de Stuart me regresa a la realidad, parpadeo y seco las lágrimas que tenía en la mejilla

– ¿Esta bien? – me pregunta Adán

Respiro profundo y cuento hasta diez – sí – ignoro sus miradas y me concentro en tranquilizar mi corazón

Agarro mi celular y entro a las redes sociales para buscar el perfil de gema...se que me dije que esperaría pero no puedo evitar querer tenerla...está en una misión así que me conformaré con ver sus publicaciones