''ARCANUM'' elizabeth y la corona oscura

capitulo 3

                                               [bestias ] parte 1

Ese sonido... No, no, no.
Tiene que ser una broma.
Un escalofrío recorre mi espina dorsal mientras todos mis sentidos se ponen en máxima alerta. La adrenalina que mi cuerpo había quemado vuelve de golpe. Sin delicadeza, empujo a Cassian. Alejándome totalmente ignorando su presencia.

El rugido de esa horrible bestia se escucha de nuevo, esta vez con más fuerza. La tierra tiembla con una sacudida brutal, y sé sin ninguna duda lo que es. Cruzo la mirada con Xion, y no hay duda en sus ojos: Está cerca.

Sin pensarlo dos veces, corro a prepararme junto a los otros soldados, que comienzan a moverse de un lado a otro para organizarse. Todo mi ser parece estar en otro mundo, mis movimientos son automáticos, mientras mi mente está atrapada en aquel día, el día en que perdí una parte importante de mi ,cuando lo perdí...Mi corazón late con un único pensamiento: Es mi momento de venganza.

Aetherion es la ciudad central, el símbolo de unidad, pero también es la más expuesta. Sus fronteras colindan directamente con el Bosque Oscuro. O, como lo conocemos todos en los 5 reinos, Darkness. Bosques sombríos que se extienden por tierras desconocidas. Nadie sabe con exactitud dónde terminan, solo que están por todas partes.
Dentro de ellos habitan miles de bestias y criaturas malignas, siempre al acecho, buscando una oportunidad para extinguir la luz de nuestros reinos.

Siempre buscando la formas de perturbar la paz y armonía

El peligro es evidente: si esas bestias están cerca, algo ha salido mal con los soldados que cuidaban las fronteras, y toda la ciudad podría estar en peligro.

Con agilidad, me coloco la armadura de la Legión Dragón mientras el caos y la preparación para la batalla se desarrollan a mi alrededor. La combinación de negro y rojo de la armadura parece fusionarse con el entorno sombrío. El negro predomina, dándole un aire imponente, mientras que el rojo resalta en la parte inferior de la falda y en algunos detalles decorativos ,El corpiño, hecho de metal oscuro con bordes ornamentales, se ajusta a mi figura, destacando una pieza decorativa en el pecho. Las mangas negras, acentuadas con rojo en las muñecas, y los guanteletes que protegen hasta los codos completan el atuendo. Los pantalones negros ajustados se integran perfectamente con la armadura, proporcionando comodidad y resaltando mi figura.

La falda es una mezcla de capas con acabados en rojo y detalles dorados en forma de dragones bordados a lo largo de los bordes. Las piernas están protegidas por placas oscuras con grabados en las rodillas, y las botas tienen un diseño puntiagudo que aporta un toque agresivo. Mi cabello largo y negro cae suelto, y mi rostro pálido resalta contra el oscuro brillo de la armadura. Con determinación, salgo a enfrentar la batalla. En el camino, me encuentro con Vic y Jack, ya cambiados y listos para la pelea. Sus rostros están serios y sin emoción, pero en sus ojos puedo ver esa chispa de preocupación. Ellos saben lo que me atormenta y el dolor que consume mi alma en este momento.

Antes de que puedan hablar, hablo:

 —Por favor, no digan nada al respecto. Solo salgamos de este maldito lugar y acabemos con esas malditas bestias —expreso con firmeza, aunque con un sabor amargo en la boca.

Ambos se miran y luego vuelven a fijar la mirada en mí. —Está bien, dama del hielo. Vamos a acabar con esas bestias horribles —responde Jack con su característica picardía. 

—Quien salga más herido invita las bebidas en el Bar Zoe esta noche —añade Vic con diversión.

No puedo evitar sonreírles. Sé que hacen todo lo posible por darme fuerzas.