Los jovenes se encontraban viendo una película de misterio, cortesía el petirrojo menor. Tim se encontraba en el sofa revisando algunos papeles importantes, en su regazo yacía descansado su niño, el pequeño leía con curiosidad las inocentes páginas de un libro de cuentos, perdido en los fantasiosos relatos de hadas y princesas
De repente, una alarma de emergencia que pocas veces había azotado sus tímpanos sacudió la montaña. En la pantalla se pudo apreciar el rostro de del caballero oscuro, su cuerpo se movía en una danza ruda en el campo de batalla
—Young justice diríjase a (Inserto ubicación) ¡Ahora!— Ordenó el señor de la noche
Los jovenes— y Timmy, el verdadero young justice— rápidamente zarparon a la acción en la nave de tonos rojizos cual rosa ensangrentada de la marciana
Después de lo que pareció una eternidad, llegaron al lugar donde se encontraba la Justice League. Los héroes se enfrentaban a un lobo—un lobo siempre cuida a su loba auuuuu—era jodidamente alto, de pelaje de matices grises, con colmillos afilados como cuchillas manchados de sangre seca. En su cuello yacía un collar de plata con el nombre del dueño del animal: Zephy
—Mi amo ya hace tras varotes de metal, su espíritu arde en llamas de soledad e injusticia. Le juré venganza hacia los que se ponen una máscara y se hacen llamar salvadores de este mundo hostil y perdido...¡Cumpliré con mi promesa!— Gritó el animal.
—Esa...¿Esa cosa puede hablar?— Preguntó con incredulidad Barry
Sin previo aviso el animal sacó— ¿de dónde?, no sabemos, del culo seguro— una especie de control interdimensional, tenía múltiples botones de tonos rojizos carmesí. La criatura abrió un portal con rapidez. Tim, al ver esto, intentó arrebatarle el control, pero la bestia lo atrapó con facilidad. En un movimiento brusco, lo lanzó contra la pared, que, al impactar, se resquebrajó y se desmoronó en pequeños fragmentos.
Red Robin yacía inconsciente, desplomado en el frío suelo de cemento. Su hijo, que había seguido a su padre sin ser notado, se acercó rápidamente al ver la escena. Con el corazón acelerado, el pequeño voló hacia el cuerpo inmóvil del héroe, angustiado y lleno de temor.
—¿P-papá...?— lo llamó, su voz apenas por arriba de un pequeño susurro. Sus ojos azules cual esferas amenazaban con derramar lágrimas de tonos cristalinos. Con sus pequeñas manos movió suavemente al mayor, sin embargo este no respondía en absoluto. Sin poder hacer más el pequeño cayó de rodillas y soltó un profundo de desgarrador llanto
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Graxx por leer <33
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