El capricho de la casa <-- Taegguk

6

  

   Jungkook corrió escaleras arriba tan pronto llegaron a su hogar. Ingresó rápidamente al despacho de su madre y prendió su computadora de escritório para luego buscar su gmail. Tragó saliva, apenas había llegado la información con una mala nueva noticia. Imprimió la nota antes de eliminar por completo el archivo de sus datos.

   Sería el fin de su libertar sí ella se enteraba de los resultados de ginecología. Guardó el papel impreso bajo su ropa, estremeciendo tras oír pasos tras suyo.

   — Jung...Kook...—Kim intentaba recuperar el aliento tras haber corrido junto a él. — ¿Qué sucedió? —Volteó a verlo, tragó saliva de nuevo, no tenía ya por qué ponerse nervioso, todos sus extraños sentimientos hacia el chico se debían a estúpido instinto Omega.

   — N-Nada... —Sin embargo, aún se veía obligado a apartar la vista cuando la firme mirada del chico lo hacía encogerse de cuerpo. Frotó la punta de su pie en el suelo intentando desestresarse.

   — ¿Nada? Jungkook te pusiste a llorar rato antes y me hiciste correr hasta aquí. —Se acercó a él. Mordió entonces su labio inferior atreviéndose a verlo. Él era un Omega ahora... ¿Y Taehyung sería un Alfa y no lo sabría? — ¿Qué sucedió? ¿Te han dado resultados? —.

  — ¿Q-Qué? No sucede nada Kim, no seas un niñero chismoso, sólo recordé que me saqué un nueve en matemáticas en vez de diez y necesitaba ver mi boletín antes que mi madre, ¿capicci? —Kim entrecerró sus ojos. Jungkook tomó un bocado de aire. — Vamos, salgamos de aquí o mi madre nos matará. —

   — ¿Un nueve como mala nota? Vaya, y yo que me alegraba con un cuatro para aprobar los examenes para rendir las materias. —Bajaron a la planta baja, Jungkook buscando actuar con normalidad tras encontrar a su Nona observándolo de pie en la puerta de la cocina. Ella miró a Kim antes de regresar a él. Sus mejillas se encendieron.

   — ¡¿Q-Qué?! ¡No estamos haciendo nada! —Exclamó con culpabilidad tomando distancia del mayor. Taehyung alzó una ceja volteandose a ver a la mujer con confusión.

   — No le dije nada señorito Jeon. —Habló ella con tranquilidad, sonrió luego viendo como el más pequeño de la casa apartaba su mirada con pena. — Joven Kim, ¿Te quedarás hoy? La señora Jeon regresará a buscar el informe de ginecología y se irá con el señor a una salida al pool con amistades cercanos. —Explicó. Jungkook no pudo evitar ver al castaño interesado en su respuesta.

   — Claro, no hay problema... ¿Aúnque salen realmente seguido por lo que veo? —Indagó el Beta echando un vistazo a su móvil. El Omega mordió el interior de su mejilla pensando en su pregunta. Cierto era que sus padres no les gustaba quedar tanto tiempo en casa.

   — Usualmente es trabajo pero sí les gusta pasear bastante, a veces el señorito los acompaña pero se aburre mucho así que decidió no acompañarlos ésta vez. Ahora, iré a hacerles las merienda antes de irme. —Taehyung alzó la vista al bajito azabache que permanecía de pié inmóvil observándolo en silencio. Él vió hacia otra parte antes de finalmente regresar y mantenerle la mirada. La mujer se adentró a la cocina.

   — ¿Justo hoy se irá a cuidar de su familia? —Indagó el mayor por lo bajo. Él titubeó en un principio, luego asintió. — ¿Seremos sólo tú y yo? —. Se acercó a este guardando su móvil. El caprichoso chico encogiéndose en su lugar.

   — S-Sí no queda de otra... Deberé soportarte un poco más. —Dijo él apartando sus ojos hacia otra parte con desinterés. Kim suspiró rodando sus ojos.

   — Uh, bueno, iré a mi casita...

   — Espera Taehyung, ¿para qué? —El Beta se detuvo de marcharse a la molesta vocecita taladrandole la oreja detrás suyo.  — Nona está haciendo la merienda para los dos, no puedes irte- —.