3- desconocido

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1 año y 3 meses después...

¡Blasty date prisa!—Apresura el mejor amigo del mencionado con emoción en su voz.

El cenizo rueda los ojos y sigue al pelirrojo fingiendo indiferencia al momento de entrar al gran restaurante.

Dentro se encuentra toda la clase 2-A hablando y esparciendo un ambiente cálido en el lugar. Decidieron salir todos juntos a disfrutar el tiempo libre -ya que tendrán unas breves vacaciones- , relajarse y ponerse al día con sus amistades luego de estar encerrado estudiando. Los exámenes se dieron por finalizados y todos lograron aprobar la mayoría de materias en el primer intento.

El ojirubi se sienta junto a Kirishima y Momo. Observa a todos sus compañeros y sonríe a medias contemplando lo alegres que parecen todos, procurando que nadie lo atrapé y se de cuenta de que realmente si a llegado a querer a los idiotas de sus compañeros.

El resto de su skuad esta frente él utilizando los palillos como si fueran  dientes de morza. Iida desde el otro extremo de la mesa los regaña por estar utilizando inadecuadamente los objetos que les proporciona el local; e Izuku intenta relajarlo diciendo que  solo están jugando y que no cree que a los dueños les moleste realmente.

En la otra punta los chicos más calmados  comen y platican tranquilamente ignorando el ruido que provocan en el otro lado de la mesa. Se puede notar la clara diferencia de personalidad que hay. Mientras los otros gritan y cuentan chistes, ellos prefieren mantenerse callados y escuchar las estupideces que dicen los otros.

Las -recientemente anunciadas- novias a su lado plática encerradas en su burbuja de amor. Fueron aceptadas inmediatamente por todos sus compañeros en cuanto se dio a conocer los sentimientos que las chicas compartían, así que son libres de expresar su cariño sin ser juzgadas. Claro que a veces cuando quedabas en medio de todo el coqueteo y muestras de amor resultaba un poco incomodo.

Si, era un ambiente realmente cálido. Cualquiera que los viera creería lo mismo, después de todo, eran solo un grupo de jóvenes divirtiéndose olvidando sus preocupaciones.

Luego de todo el tiempo que pasaron juntos la clase se hizo realmente unida. Pelearon contra villanos peligrosos y compitieron entre ellos de forma amistosa -o no tanto-, se apoyan y sin que se dieran cuenta ya eran como una familia.

— Bakugo ¿me pasas la sal?— pidió Oijiro señalando el pequeño frasquito que tenía el mencionado frente él.

A comparación de como hubiera reaccionado hace un año, el de quik explosivo le cumple su pedido sin insultarlo o empezar a gritar.

Luego de mucho trabajo y platicas con profesores Katsuki tuvo un cambio en su personalidad, o mejor dicho, maduro. Sigue insultando y gritando, pero ya es más posible entablar conversaciones con él sin salir volando. Todavía trabaja en la parte de tener paciencia y controlar al 100% su ira, pero está mejorando considerada mente. Incluso lleva consigo una pelota antiestres que aprieta cada que alguien está atravesando los -cortos- limites de su paciencia.

Y no es el único que lo hizo. Koda dejo de lado parte de su timidez y empezó a hablar y participar más en los eventos sociales. Mineta dejo parte de su lado pervertido; sigue soltando un par de comentarios desubicados, pero luego de que Mina y Jiro lo ataron a un poste de luz y lo dejarán allí toda la noche aprendió a respetar un poco más a las mujeres.

En conclusión: maduraron

Siguen siendo jóvenes, pero tienen cierto grado de responsabilidad y conciencia que en primer año no.

—Mjm— se aclara la garganta Yaoyoruzu poniéndose de pie mientras golpea levemente un vaso, así consiguiendo tener la atención de todos los presentes en la mesa— Me gustaría hacer un brindis, para celebrar el que todos aprobamos...— varios en la mesa festejan el ya no tener más exámenes y poder descansar luego de dos semanas realmente estresantes— Y también... recordar a los que no están con nosotros.

JUNTOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora