Perdido en Gotham

Capítulo 19: Un asunto de suma importancia

Resumen:

Robin debe completar un objetivo que solo Spider-Man puede ayudarlo a lograr. La reputación de Robin puede estar en juego...

"...y como está tan concentrado, solo necesito un cartucho pequeño para contener el líquido para telarañas necesario para una noche entera... bueno, depende de cuánto use. Ya me he quedado sin líquido antes en medio de una pelea, por eso empecé a llevar cartuchos adicionales conmigo".

—Aun así —dijo Tim mientras examinaba el lanza-telarañas—, es increíble. ¿Cómo haces...? —Hizo como si estuviera lanzando una telaraña.

"Presiono el botón con los dedos medio y anular. Toco una vez para disparar, dos veces para soltar".

Tim se colocó el disparador sobre su guante Red Robin e intentó presionar el botón. Frunció el ceño al ver que no pasaba nada.

"No está funcionando."

"Lo sé", dijo Spider-Man mientras recuperaba el cañón. "Diseñé específicamente el botón para que necesites la fuerza de una araña para presionarlo".

"¿Por qué? ¿Para que tus enemigos no puedan usar tu equipo?"

"Eso y esto es lo que probablemente pasaría si una persona normal lo usara".

Tomó el brazo de un muñeco de entrenamiento y le puso el cañón en la mano. Luego ajustó el brazo para que quedara sobresaliendo. Manteniendo una distancia segura, Spider-Man presionó el botón del cañón.

Una telaraña salió disparada, pero el brazo del muñeco fue arrancado y salió disparado hacia atrás como una bala de un arma. Spider-Man caminó con calma hacia donde había caído el brazo y recuperó su arma. Cuando volvió a mirar hacia arriba, Red Robin lo miró boquiabierto antes de sonreír.

"Impresionante."

"Parker."

Ambos se dieron la vuelta y vieron a Damian entrando en la cueva. Estaba vestido con todo su equipo de Robin, excepto la máscara. Como de costumbre, su rostro estaba muy serio.

"Mi padre quiere que esta noche patrulle con un aliado nuestro. He solicitado tu ayuda".

"¿Necesitas mi ayuda?" ofreció Red Robin.

—No —dijo Damian sin rodeos antes de volverse hacia Peter—. Sólo Spider-Man podrá ayudar.

—Bueno. —Claramente ofendido, Tim abandonó la Batcueva.

—No tenías que ser tan grosero —le dijo Peter a Damian.

"No era necesario Drake. Se lo dije", respondió el niño de nueve años mientras se ponía la máscara.

Spider-Man suspiró. "¿En qué necesitas mi ayuda?"

"Esta noche, un aliado nuestro nos ayudará a investigar una posible red de tráfico de personas. Sus capacidades premonitorias y su capacidad auditiva agudizada nos ofrecerán una ventaja".

"Puedes simplemente decir 'sentido arácnido', ¿sabes?"

"Ese nombre suena tan... infantil."

—Bueno, yo tengo dieciséis años y tú nueve. A menos que me equivoque, ambos somos jóvenes.

"¿Ayudarás o no, Parker?"

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"Entonces", dijo Spider-Man una vez que llegaron al punto de encuentro, "¿dónde está este aliado?"

"Llegamos temprano", admitió Robin. "Debo informarte algunas cosas sobre ellos antes de que lleguen".

—Está bien... —Spider-Man esperó.