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6.


Un expresso caliente y jugo de naranja. En la mesa donde estaban las dos tazas, había una atmósfera fría.

"Vamos a hablar". Sin embargo, tanto Cha Seung-joo, con el expresso caliente frente a él, como Jeong Yeo-won, con el jugo de naranja, no abrieron la boca. Solo levantaban las tazas frente a ellos y bebían repetidamente. Al ver que Cha Seung-joo no mostraba señales de hablar, Jeong Yeo-won terminó su jugo de naranja y se levantó de su asiento.

"Si no tienes nada que decir, me iré".

"No, espera. Solo no sabía cómo empezar a hablar".

Con un suspiro ante esa voz llena de confusión, Jeong Yeo-won volvió a sentarse, y el Sr. Shin, que estaba en la mesa de enfrente, también se sentó de nuevo. En su mirada había una pregunta sobre si estaba bien, y Jeong Yeo-won asintió levemente.

"¿Has estado... bien?"

"Sí. He estado bien, dentro de lo que cabe. ¿Y tú, Cha Seung-joo?"

"Yo también he estado... bien".

Parece que has estado bien después de dejarme en ese estado. Una risa burlona y un comentario sarcástico estaban a punto de salir de sus labios, pero Jeong Yeo-won finalmente se tragó esas palabras. No quería gastar más emociones en este tipo de persona. Especialmente en un día tan agradable como hoy.

"Me alegra que hayas estado bien. Pero, ¿es esto todo lo que tienes que decir? Si es así, me iré primero".

"...Jeong Yeo-won".

Después de un largo rato de dudar y morderse los labios, lo que salió de la boca de Cha Seung-joo fue el nombre de Jeong Yeo-won. Y mientras esperaba las siguientes palabras, un sonido sordo resonó y una taza con un líquido amarillo brillante fue colocada nuevamente frente a ella.

"Es jugo de mango. No puedo hacer lo que el Sr. Kwon hace todos los días, 'personalmente', pero al menos tómalo".

Era el Sr. Shin. Con una voz extremadamente cortés, el Sr. Shin sonrió fríamente mientras miraba a Cha Seung-joo y luego regresó a su lugar. Decir que el Sr. Kwon hace jugo de mango para él. Aunque era cierto hasta cierto punto, no era un hecho completamente cierto, así que se sintió incómodo y no pudo mirar a Cha Seung-joo directamente.

No era todos los días, sino de vez en cuando. Ahora, añadir una excusa sonaba ridículo, así que Jeong Yeo-won finalmente suspiró y tomó un sorbo de jugo de mango. Entonces, escuchó la voz de Cha Seung-joo.

"Parece que Kwon Do-jin hace eso".

"......".

"Supongo que, aunque haya perdido la memoria, sigue siendo la misma persona".

Su voz sonaba amarga. Aunque había perdido la memoria, seguía siendo la misma persona. Jeong Yeo-won quería reírse de esa afirmación. Lo que él hacía ahora era solo por mango. Si no hubiera sido por mango, Jeong Yeo-won se habría divorciado de él y no se habrían vuelto a encontrar.

Si no hubiera sido por mango, nada de esto habría sucedido. Jeong Yeo-won se centró en eso.

'¿Do-jin?'

'¿Sí?'

'¿Por qué te gustó?'

'¿Qué?'

'¿Qué fue lo que te gustó de mí? Dijiste que fue amor a primera vista.'

Antes, cuando Do-jin no había perdido la memoria, le había preguntado eso. Era una pregunta común entre parejas, una pregunta dulce que no sabía que se volvería tan dolorosa.

Regresa mi amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora