pijamada?

10 1 1
                                        

Mi cabeza siempre está imaginando cosas que quisiera que pasaran. Algunas son bastante probables, otras no tanto.

Esta.... podría decirse 50/50

Es el dado caso de que pasaría si hubiera una pijamada

Me he imaginado tantas, en serio tantas cosas

Pero la que más resuena es una que se baso el algo que dije hace muchísimo tiempo de yo cocinando y ella haciendo cualquier otra cosa y probablemente distrayendome.

El que cocinaría? Ni idea, le tengo prometido unas torrejitas pero probablemente tardaríamos demasiado en eso. Yo en pijama porque odio cocinar en ropa de salir, y ella con ropa entre pijama y de salir porque le da pena que la vea en fachas

Estábamos cocinando entre risas y bromas, pero no me había abrazado desde que llegué, y yo quería mi abrazo, claro que no lo iba a pedir. Pero cada que pasaba detrás de mi esperaba ese abrazo, o cada que estaba frente a mi riéndose lo esperaba de la nada, pero no, y me quedé esperando aún cuando lo que cocinabamos estaba listo e íbamos al cuarto a ver películas

Le debía unas películas y ella a mi igual.

Nos acostamos en la cama con la taza de comida que se supone no debíamos meter al cuarto porque podíamos botarla pero se supone que íbamos a tener cuidado. Empezamos viendo la película, cada una acostada a un lado de la cama con la taza en el medio, aún era temprano y las demás llegarían en un rato bastante largo, al menos 3 horas, teníamos 3 horas solas en un cuarto y su mamá acostada en su cuarto con audífonos, ¿Qué podía pasar?

La veía de reojo de vez en cuando, la luz del televisor le daba en la cara y los ojos se veían más brillosos de lo normal. Por un momento deje de ver la película para analizar y aprovechar el momento, el ambiente, el olor de la habitación, olia a su perfume; la cama, las sábanas y hasta ella. Me sentía bien, pero algo me faltaba. Las cosas habían estado bastante tranquilas y llevaderas pero el evitar a toda costa el contacto físico innecesario se había hecho notar bastante. El que no me abrazara cuando estábamos cocinando a pesar de que yo quería si me bajo un poco los ánimos, ya que yo no lo iba a hacer para no incomodarla por si no quería. Varias cosas así sucedieron en una hora cocinando, las risas no faltaron y los chistes e insultos tampoco, pero los abrazos si, muchos. Y ahora estaba en su cama teniendola tan cerca y a la vez tan lejos, pudiendo hacer lo que siempre hacía de pasar los dedos y las uñas por su brazos pero sin hacerlo por temor al rechazo de que no quisiera. Era exasperante.

Tenerla y a la vez sentir que la perdía, era ...para desesperarse mucho. Pero ahí estaba yo, tranquila, acostada en la cama fingiendo ver una película y desviando la mirada a su rostro llegando a ver pequeñas risas o gestos por las escenas.
Me iba a conformar con eso, hasta que se acabó la comida y puso la taza en el suelo, riéndose me dijo que le hiciera espacio para no caerse, pero ese espacio incluía uno muy cerca de mi.

El aire estaba prendido, pero yo tenía calor. Me sentía otra vez como cuando aún no la abrazaba, cuando me daba vergüenza verla mucho tiempo o cuando me guiñaba el ojo, me sentía exactamente igual de nerviosa, sin saber que hacer. Podía alejarme pero quizás se sentiría mal, y si me quedaba ahí podía ser una prueba que iba a reprobar por no alejarme y mantener la distancia que según debíamos mantener, y si por algún motivo me llegaba a medio mover hacia ella podía tomarlo muy mal

Estaba tiesa, viendo la película, y su mano cerca de la mía.

Solo tenía que mover un poco la mía para tocarla. Hace mucho que no lo hacía, extrañaba ese contacto que a veces parece tan ridículo pero cuando dejas de sentirlo sientes que podría mantenerte con vida fácilmente.
Sus brazos estaban en contactos con los míos, podría abrazarla, podría darme vuelta y apoyar mi cabeza en su hombro, podría hacer tantas cosas, pero estaba paralizada.

Las Noches Y Sus Cosas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora