You broke me First (Jungkook y Tn)

°19°

PV TN

Algo no se sentía bien.

De alguna forma estaba sintiendo que algo no encajaba.

Los doctores me examinaban tan detenidamente y yo siquiera sabía qué rayos pasaba.

—El bebé está bien —dijo, Jungkook mientras entraba a la habitación—. Los doctores dicen que no corres riesgo, pero por las dudas debes descansar hasta que des a luz.

No podía creerlo. ¿Cuándo había pasado? Lo último que recuerdo es haber estado con él en el parque de diversiones. Era extraño, muy extraño.

Pasos apresurados se escucharon en el corredor. Varias enfermeras gritaban a un hombre que se detuviera.

—¡¿Dónde demonios está?! —abrió de un portazo la puerta—. Tú. Malnacido...

Ese hombre se acercó a Jeon y tomó del cuello de su camisa para luego darle un fuerte cabezazo.

—Oye, ten más cuidado con mi esposo —salí a la defensiva.

Él se giró a verme y tomó mi rostro entre sus manos. Examinó cada parte de mí y noté que sus ojos estaban llorosos e inflamados.

—Creí que jamás volvería a ver tu hermoso rostro... —musitó con la voz entrecortada—. Pensé que había perdido lo único que me queda.

No lo entendía, pero había algo en su rostro que me parecía familiar. Entonces lo recordé. Pequeñas piezas vinieron a mi mente.

—Nam Joo Hyuk... —le sonreí ampliamente. Mis brazos rodearon su cuello.

—¿Cómo es posible que recuerdes a este imbécil? -la voz de Jungkook resonó detrás. Su nariz sangraba—. ¿Qué tiene de especial?

—No es eso. Simplemente recordé que hace años que no lo veo —confesé. Era verdad, no nos veíamos desde que era una adolescente.

Sus ojos se abrieron. La expresión de Joo Hyuk se volvió preocupada y algo triste. Sus ojos nuevamente se cristalizaron. Apretó sus labios mientras sus manos descendían hasta mis hombros.

—No... Esto no puede estarme pasando. Por fin, cuando te tenía tan cerca -las lágrimas adornaron sus ojos y sentí que mi pecho dolió—. Yo...

Justo en ese momento Jungkook lo apartó con brusquedad y lo fulminó con la mirada.

—No toques de esa manera tan familiar a mi esposa.

—Es irónico que la llames tu espo...

En ese instante fueron interrumpidos por mi suegra. Sus ojos me fulminaron a mí y a Joo Hyuk. Era demasiado intimidante con el simple hecho de tenerla parada en frente de nosotros.

—Señora... —habló el mayor.

—Soy tu madre, Nam —su voz sonaba tan seca.

—Madrastra, de hecho. No soy su hijo —la retó él.

Una pequeña risita irónica escapó de los labios de ella y Joo Hyuk se mantuvo en su posición. Sabía que ellos no se llevaban bien desde que su padre lo llevó a vivir en su casa, todos los días peleaban

—Yo te crié. No te atrevas a desafiarme porque sabes lo que pasará —sonaba demasiado amenazante.

—Ya no soy el mismo chico asustadizo, señora. Creo que usted debería temerme más a mí, los roles siempre se invierten —este se puso en frente de la señora con autoridad.

—Cuida el tono con el que te diriges a mi madre —Jeon quiso intervenir, no obstante, su madre lo detuvo.

—¿Cómo está tu madre biológica? Oh... Espera. -Fingió sorpresa—. Olvidé que está como a muchos metros bajo tierra.