Capítulo 08.

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Era de mañana, Jin y Jimin se encontraban tomando té en el jardín.

Jin sugirió tener un momento de tranquilidad para olvidar todo lo abrumante y centrarse en ellos mismos, Jimin ha progresado a su ritmo a pesar de sus tristezas y caídas anímicas, ha logrado superar y continuar.

Antes de que los alfas partieran de nuevo a las oficinas, Jungkook buscó a Jimin, pero este lo evadió. Esto desconcertó un poco a Jin quien se dio cuenta de la escena.

Fue un poco inusual porque al principio Jungkook parecía agradarle a Jimin, y ahora simplemente huía o se escondía de él.

Jin suspira —¿Jimin, te puedo hacer una pregunta?

—Si claro —responde viendo los árboles.

—Quisiera saber qué piensas de Jungkook, ¿te molesta de alguna forma? —bombardeó el omega, Jimin se atragantó con la bebida por la pregunta tan repentina de su amigo. Jin se acercó dando pequeñas palmadas en su espalda—. Lo siento, querido —sonríe con pesar.

—Es lindo y parece ser muy amable, es un alfa que causa mucha curiosidad, y creo que es buena persona —dice buscando algo para ayudar a su amigo a limpiar.

—Lo sé, es un poco intenso porque todo su linaje proviene de alfas puros, padres, abuelos, y no sé cuantas momias atrás —Jin sorbe de su té.

—¿Qué? —Jimin estaba tan sorprendido que tomó asiento en una de las sillas luego de limpiar.

—Oh, sí, ¿por qué crees que su alfa es el mejor rastreador? Además, debo recordarte que fue reclutado para convertirlo en unos de los mejores agentes, ha sido llamado a otros países para comandar misiones que han terminado siendo un total éxito. Jungkook es una gran persona y alfa.

—Vaya, eso sí que es sorprendente, él no parece de esos alfas raros —hace una mueca.

—¿Como los que te gruñen y te orinan encima para marcar territorio? No lo es —sonríe—. Yongsun también es pura, pero su crianza fue buena y no se aprovechan de eso; tuvieron un entrenamiento muy especial para llegar hasta donde están, además la Academia les enseñó a cómo pasar como un alfa común para tomar provecho en las misiones y desconcertar a los maleantes.

—Eso es sorprendente.

—Lo es, yo hubiera sido una máquina asesina Jimin, tenlo por seguro, pero mi amor por la psicología fue mayor —Jimin, asiente, estaba de acuerdo con su amigo.

—Eso es más que seguro, tú eres muy decidido y algo peculiar. Eres lo que muchos deseamos ser.

—Gracias, bebé, eres muy amable. Entonces... ¿No te incomoda Jungkook?

—No —niega con efusividad—. Él ha sido muy amable.

✧✦✧

Los días avanzaban, Jimin aún sentía mucha vergüenza ante Jungkook, el alfa se había portado tan bien con él, que hasta se sintió un poco especial. Pero Jimin sentía que no merecía nada de eso y además ¿cómo alguien como Jungkook se podía fijar en él? No dejaba de repetirse que el alfa solamente era amable y cordial.

Y no podía hacer nada para evitar esos tontos pensamientos, era imposible para él no ilusionarse, ya que el alfa le veía de una forma diferente a como lo hacían los demás.

Jungkook era tan inexplicablemente hermoso, atento, amable y él simplemente no era nadie.

Tenían momentos en donde habían compartido algunas palabras, acciones que dejaban a Jimin sin poder hablar, pequeñas miradas que compartían mientras cocinaban o se encontraban por el pasillo o jardín.

cenizas › kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora