Capitulo 8

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Después de aquella conversación un poco...

Subida de tono.

Los dos se durmieron profundamente, el avión ya había aterrizado, Sebastián y Erick no se habían despertado aún hasi.

Solamente fueron despertados por la azafata ya que ellos eran los únicos que quedaban dentro.

Apenados por ello salieron rápidamente.

Ya hasta los pilotos se habían ido.

- Hay no que vergüenza que a los dos nos Allan despertado - Menciono Erick poniéndose su gorra y unos lentes de sol.

- La verdad si, nunca me había pasado, pero bueno mejor vallamos a lo que venimos.

Salieron del aeropuerto y se subieron al primer taxi que vieron pues algunas personas los reconocieron y ya los estaban persiguiendo.

- ARRANCA - dijieron los dos al mismo tiempo.

El taxista confundido empezó a conducir - ¿A dónde los llevo... - se dio cuenta de quienes son - Sebastián Córdova en mi taxi que emoción!!!.

El mencionado solo pudo reír no les quedaba de otra que estar en ese vehículo, de igual le dijo a la dirección a donde quería llegar.

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Los dos jugadores ya estaban caminando a dónde estaba Diego.

El cual estaba acostado en posición fetal en una banca de un parque público.

- Ay Dieguito que te hicieron - dijo Córdoba abrazando al mencionado.

- Se siente b..ien feo que algui...en te pon...ga los cuernos sebas - Diego no podía resistir el llanto podía hablar solo con la voz entre cortada.

- Diego que tanto te hizo ese maldito - menciono Erick preocupado.

- Les voy a decir que tanto paso, que enserio tengo que decirlo para sentirme un poco más tranquilo, lo que paso fue que...

Diego al abrir esa puerta poco a poco solo para que su ojo pudiera ver lo que pasaba.

Solo vio como Kevin estaba haciendo el amor con Israel.

Los gemidos de ambos eran más fuerte que la música la cual ya habían bajado de volumen.

Cada movimiento, cada momento, cada segundo acababan con el corazón de Diego destrozandolo poco a poco. Cuando agarro el suficiente valor abrió completamente la puerta viéndolos completamente.

Ya habían pasado unos tres minutos, el tabasqueño estaba de pie con su cara demacrada, las lágrimas de sus ojos no dejaban de salir.

El primero en notar la presencia de Diego fue Israel el cual solo pudo susurrarle al oido a Kevin de alguien más en el cuarto, Kevin lo vio inmediatamente se trató de cubrir para intentar explicar lo que pasaba.

- Diego porfavor no es lo que piensas enserio.

- No Kevin ya vi suficiente, me duele saber que yo me preocupe por una persona a la cual yo defendí con mi alma de la prensa, me duele saber que alguien que yo lo apoye en sus peores momentos, me duele saber que alguien no halla apreciado lo que yo he hecho por el, me duele saber que a la persona que yo ame me sea infiel con alguien, yo que fui el único que te felicito en tu cumpleaños y me pagas de esta manera Kevin, no se vale Nahin no se vale, espero que seas feliz con el.

- Diego yo... No se que decir - trato de dirigirse a Kevin.

Israel solo estaba acostado en la cama mirando hacia el techo, evitando ver la escena.

- Así déjalo Kevin solo te quiero decir que todo se regresa, tarde o temprano.


- Y así fue como pasaron las cosas chicos, corte con el y no quiero saber nada de él ahorita.

- Claro que no quieres saber nada el pues si el te traicionó por todo lo que has hecho por el - menciono Erick.

- Lo se chiquito, podemos irnos a otro lado porfavor ya no quiero estar aquí.

Ambos hicieron caso a la petición de Diego ambos se fueron de ahí, fueron a una tienda y el compraron ropa para que tuviera algo que ponerse.

- Ay mira Dieguito ese suéter con cuadrados negros y verdes, se te vería muy bien con esta camiseta negra. - hablo Córdova teniendo el suéter en la mano derecha y en la izquierda la camiseta.

- Claro dieguito es una buena combinación - dijo Erick.

- No se weyes, enserio un nuevo estilo para mí - Sonrió - Aunque no sería mala idea.

- Ándale pues, pagamos esto vamos a un baño y te lo pones, de ahí nos vamos todos un restaurante.

- Me parece buena idea, pero a que restaurante vamos a ir? - dijo Diego algo confundido.

- Al que esta aqui en el centro comercial, nomas que esta en el tercer piso, espero que a ambos les guste por que es comida japonesa - menciono Sebastian entusiasmado por la idea.


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- Diego la ropa que te escogimos se te ve mejor puesta, que en nuestra propia imaginacion - dijo Erick.

Los tres ya se encontraban en el restaurante, en una mesa ellos se la pasaron platicando hasta que llego la mesera a tomarles su orden.

Indicisos por lo que pedirian le preguntaron a la mesera que es lo que le recomienda.

Esta les dijo que les recomienda Sushi o un ramen.

Cómo los tres no sabían que pedir pidieron un ramen, lo que no sabían esque ese platillo iba a llegar bien servido, un plato algo grande.

Al llegar su comida se quedaron con una cara de preocupación pero ala vez de alivio por el hambre que tenían los tres.

Ni les quedó de otra que empezar a comer del plato de ramen más grande que habían visto.

El primero en rendirse fue Erick que dejó casi vacío su plato, el siguiente fue Diego, pero Sebastián también se rindió no acabo su plato.

- Ay no acabe bien lleno ¿y ustedes? - pregunto Diego.

- Yo sí - menciono Erick

- Yo también pero ya estoy cansado también, hay que entrar a nuestros cuartos.

Los tres ya estaban frente a los dos cuartos de hotel que habían pagado, Diego opto por un cuarto individual y Sebastián y Erick en un cuarto para dos.

Y ese cuarto para dos tiene una sola cama...





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¿Cómo están? Espero que bien una disculpa por no haber publicado.

- neto

¿Seremos felices? - Sebastian x ErickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora