Capítulo 6.

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Vale, ya es hora de reconocer la verdad: Me encanta poner nombres parecidos a cosas de ficción real. Por eso lo hago tanto. Ya es algo canon en mi fic ¡es que me hace mucha gracia! Disfrutad del capi de hoy <3

Tras aquel fin de semana los días pasaron rápidamente. Bakugo se desahogaba con Mina contándole de qué forma le rechazó y generalmente los poquísimos ratos libres que tenía los pasaba con ella y Kirishima. Se distraía del estrés de su vida de adolescente estudiando, ensayando para la función (¡ya apenas quedaban horas para el festival!) o pegándose de hostias con Deku en sus entrenamientos privados. Pero con Todoroki la cosa había cambiado completamente: Desde lo ocurrido en su casa, el chico no había vuelto a dirigir la palabra a Bakugo salvo para cosas estrictamente necesarias "Pásame aquello", "Agáchate", "No" y cosas así. Antes del "incidente", solían hablar de vez en cuando y Shoto se especializaba en tocar los narices al rubio de forma profesional. Ahora, ya no quedaba ni eso. Antes de lo que ocurrió aquella noche Bakugo ya tenía aceptado que Todoroki jamás le vería como nada más que un compañero de clase, amigo como máximo. Sabía que en el momento que le dijera todo lo que sentía por él, el hijo de Endeavor le iba a dar calabazas (N/a: Rechazarlo) . Pero, aunque sus expectativas se habían cumplido, no esperaba que aquellas calabazas fueran más grandes que la carroza de la Cenicienta. 

Habían pasado un par de meses desde el incidente y desde que la relación con Todoroki había mejorado. A lo mejor no estaba tan consolidada como la que tenía con otros amigos como Iida o Deku, pero para él significaba algo y el hecho de que Shoto le empezase a ignorar sin miramientos le dolía. El puto imbécil de Todoroki,  parecía totalmente tranquilo y sin ningún problema a parte de la existencia del propio Bakugo. Sus amigos habían dejado de molestarle (tanto los de él como los suyos) y todo parecía estar volviendo a su cauce original, a como estaban las cosas antes del incidente. Pero, a pesar de que era lo que originalmente Bakugo quería, no estaba nada contento. Definitivamente, necesitaba un cierre para lo que sea que hubiera ocurrido entre ellos. Katsuki creía que merecía una explicación, sobre todo después de que el rechazo se produjera justo unos instantes antes de meterle el rabo hasta la garganta. Pero con la actitud que tenía el muy imbécil era misión imposible hablar con él.

Todoroki lo evitaba de cualquier forma humanamente posible. Si sus grupos de amigos coincidían y decidían pasar el tiempo juntos, el chico de hielo y fuego se inventaba una excusa peor que mala para no estar ese rato o si se quedaba, estaba en el sitio físicamente más alejado de Bakugo. En clase evitaba que su grupo de amigos se acercase a la zona de su pupitre y en los entrenamientos prácticos nunca estaba demasiado cerca como para que pudieran estar en el mismo equipo. Bakugo estaba esperando con ansias el día en el que tuvieran Biología y les tocase trabajar en el trabajo por parejas en el que voluntariamente se habían puesto juntos, pero hasta en ese momento consiguió evitarlo, diciendo al profesor que no se encontraba bien y que quería ir a la enfermería. Incluso había comenzado a ir en el coche de su padre a las clases de la licencia para no coincidir con él, donde se empezó a emparejar para cada ejercicio en los que se necesitaba equipo con Yoarashi. Bakugo, por su parte, comenzó a hablar con Camie mucho más y se terminaron dando los números. A partir de ese momento, si no tenían mucha tarea que hacer cuando terminaban las clase quedaban para ir a tomar Boba e ir a las recreativas o al karaoke. Una tradición que, inesperadamente mantuvieron durante todos los años académicos venideros del rubio.

Todo cambió para Katsuki una tarde de un miércoles tras acabar prácticas técnicas de evacuación para la licencia provisional: sin darse cuenta, él y Shoto se quedaron a solas en los vestidores. Bakugo al darse cuenta aprovechó rápidamente su oportunidad y se acercó al chico, con intención de hablar con él y volver a como estaban antes del incidente, aunque solo fuera eso. Pero en cuanto el idiota de Todoroki se dio cuenta de la situación, salió corriendo y tropezando con todos los obstáculos posibles que había en el camino del banco donde estaba hacia la salida de los baños masculinos dando un espectáculo lamentable. Katsuki no intentó detenerlo porque el simple hecho de imaginarse a sí mismo yendo detrás de eso le daba vergüenza. 

El incidente [Romance & Slices of Life] [Bakutodo | Todobaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora