Cada siglo, C.E.O del cielo manda a un ángel a examinar el infierno, para que todo este en orden y no haya ninguna anormalidad.
En este caso el ángel elegido para esta tarea fue TN, un joven ángel bastante individual, el cual es frío con casi todos...
Un día más en este jodido lugar. Cada vez que abro los ojos, deseo con toda mi alma no estar aquí, o mejor aún, no estar en absoluto. Me levanto arrastrando los pies, con una desgana que parece pegarse a mi piel, y me dirijo al armario, sacando la misma ropa de siempre. La rutina es una constante que me agota: reviso los papeles que llegan desde los círculos, peticiones de demonios de mayor rango o lo que sea que caiga en mis manos. Después de eso, me sirvo una copa de vino, como si fuera lo único que mantiene mi mente en marcha, y antes de recibir a demonios y esqueletos, voy a la cocina a prepararme algo de comer, también a conversar con la demonio que está sentada allí....
¿Espera que carajos?
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{P.O.V: Tercera Persona}
Pandemonica había despertado temprano, vio que en la habitación no se encontraba el ángel que la había ayudado a descansar y al fin relajarse. La demonio se levanta con pesadez y una flojera notable, sale de la habitación del ángel con cautela, mirando a todos los lugares para no encontrarse a la reina.
Sintió miedo después de su rabieta de ayer por estar en su castillo. Pandemonica al ver que está todo muy tranquilo y sin la presencia de nadie, va a la cocina del castillo y comienza a revisar las repisas y muebles hasta encontrar lo que buscaba, café. Sirve agua caliente en una taza y comienza a hacerse su café, al terminar, se sienta tranquilamente y lo toma con mucha serenidad.
Hasta que, ve entrar a la cocina a ella. La temida reina del infierno, que al parecer estaba muy cansada para notar su presencia, hasta que lamentablemente la nota.
Lucifer:¿Sigues aquí? -frunce el ceño, sus ojos destilan desdén mientras la observa con intensidad- Creí haber dejado muy claro lo que pienso de que te quedes en mi castillo... -su voz, baja y autoritaria, pesa en el aire como una amenaza-
