Capitulo 3: Moscow Mule

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||La gallina ciega, juguemos a buscarnos entre el pajar||

"No... esto no estuvo bien..."

Las palabras que resonaron en la habitación y en su cabeza toda la noche.

¿Y por qué no? ¿Por qué no? Si el sintió lo mismo, y no era un imbécil. Pudo sentir su conexión el como se habían olvidado de todo. El como se entregaron, no podía ser un error lo que percibió por qué estaba seguro que lo mismo que sintió el, lo mismo había sentido ella. Pero que sentido tenía seguirle, si no estaba sobria siquiera.

Tomo su ropa y se fue a su habitación. No estaba preparado para afrontarla, ni siquiera para verla. Quizá tenía que seguir buscando a la chica que lo hipnotizo esa noche, o quizá renunciaría al amor que era una mierda.

Se vistió nuevamente y se tiró a la cama, no quería soñar con ella, no queria evocarla y espero que sus sueños estuvieran en blanco y con el sopor del alcohol se entrego a morfeo.

Despertó tal y como esperaba, tieso, con dolor en la cabeza y con sus recuerdos hechos un desastre. Las lagunas apuntaban a mucho alcohol y su cuerpo, ni siquiera quería contestarse. Si algo paso, eran amigos. Y los caballeros no tenían memoria.

-Lukeee-Respiro aliviado, no pasó nada y ella estaba como siempre.

Salió de la habitación y camino hacia la sala, y quería hacer como si nada pasara, y pum realidad todo estaba ahí, la evidencia. Y el sofá estaba lleno de evidencia. Decidió ignorar de todas formas tampoco es que recordara todo. Pero al verla, las corrientes en su cuerpo despertaron y cuando fijo la mirada en su cuello, reprimio un gemido tenia varios chupones. El y sus famosas marcas de guerra, tenía que quitarse ese horrendo hábito.

-Hola Nic.-Saludo rascando su cabeza.-¿Que... hay?-Nic le dirigió una sonrisa amplia parecía ajena a todo.

-Todo bien Luke.-Parecia entender y decidió aceptar su tono, y era lo mejor absolutamente. Fingir que no pasaba nada, eran amigos y el tenía otras prioridades y un amor por encontrar. No podía poner toda los huevos en la canasta por algo que solo era una amistad y sexo. - ¿Quieres desayunar?

Asintio con una sonrisa. Eso era todo lo que necesitaba saber.

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Se llego el viernes, había elegido el conjunto de encaje rojo, se miro al espejo. ¿Realmente podría estar con Rege? Quizá se había olvidado o había querido enterrar lo que sucedió con Luke. Pero pensando claro siendo sincera, quiza no. Eligió unos pantalones negros ajustados y una blusa blanca con olanes que fajo dentro del pantalón y unas zapatillas negras, descarto el vestido negro.

Al salir de su habitación la escena era única. Rege y Luke sentados uno a lado del otro mirando el partido sobre el sofá donde, quería que la tierra se abriera y la tragara en ese momento.

¿Qué diría si ella no fuera la del triángulo? Ah si, hermanitos de vagina. Se habria burlado hasta el cansancio si no fuera ella la que estuviera en medio de esos dos. Carraspeo y llamo la atención de ambos chicos. Luke no quiso ni mirarla, tenía una expresión de irritación y Rege se incorporo y le miro como depredador.

-Disfruta tu tarde hermano.-Palmeo su hombro y Luke asintió fastidiado.

-Llego más tarde.-Dijo débilmente y salió junto a Rege. Se sentía fatal y fue peor cuando Rege le beso y palmeo el trasero. Las mejillas le ardieron tanto como la moral Pero salió de ahí.

Quería morir, quería desaparecer.

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Se dispuso a poner la televisión había tenido una jornada de ensayos en el teatro agotadora y como deseaba llegar a casa y tumbarse frente al televisor y descansar o quizá, quizá emborrachar a Nic y jugar con ella. Meh no era una opción. La rubia le hablaba normal, Pero se sentía incómodo. Tampoco el podía negar su atracción hacia ella. Busco un poco de pasta y cerveza. Se tumbó en el sofá y pensó en invitar a Nic Pero al verla tan apurada parecía que saldría. Y no se equivocó, el timbre le confirmo que iria con su novio.

Kissing you Donde viven las historias. Descúbrelo ahora