Obsesion~(rafe Cameron)

Cap 27: Control

Rafe se quedó allí parado, respirando con fuerza, mirando a Elaia como si quisiera decir algo más, pero las palabras no salían. Finalmente, con un gruñido de frustración, giró sobre sus talones y salió de la habitación, cerrando la puerta de un portazo. El silencio que quedó en el aire era denso, cargado con todo lo que no se había dicho. Elaia, temblando, se dejó caer en la cama, su cuerpo todavía tenso por el enfrentamiento.

Minutos después, la puerta se abrió suavemente, y esta vez fue Topper quien entró. Su rostro estaba endurecido, claramente enfadado, pero su mirada era más tranquila que la de Rafe. Se acercó a Elaia con pasos firmes, pero sin la agresividad de antes.

"¿Estás bien?" le preguntó, mirándola con preocupación.

Elaia asintió, aunque sus ojos seguían brillando con las lágrimas que intentaba contener. "Estoy bien... o al menos lo estaré."

Topper suspiró, pasándose una mano por el pelo, visiblemente tenso. "Lo siento por todo esto, Elaia. Rafe está... está fuera de control. No sé qué le pasa, pero no debería haberte involucrado en esto."

Elaia levantó la vista hacia él, notando el peso de la culpa en su voz. "No es tu culpa, Topper. Pero esto no puede seguir así. No puedo seguir viviendo con miedo de lo que él va a hacer."

Topper asintió, pero su expresión cambió rápidamente de preocupación a frustración. "Lo sé, lo sé... pero esos malditos pogues no ayudan tampoco. Todo esto comenzó por ellos, por JJ, por meterse donde no deben. ¿Qué crees que va a hacer Rafe cuando los vuelva a ver? No van a parar hasta que todo termine mal."

Elaia lo miró, sorprendida por la dirección que había tomado la conversación. "¿Crees que los pogues son el problema? Rafe tiene problemas mucho más profundos que ellos, Topper. Esto no tiene que ver solo con JJ o Pope. Está peleando consigo mismo, y no puedes culpar a los demás por lo que él está haciendo."

Topper apretó los dientes, claramente molesto por sus palabras. "Tú no lo entiendes, Elaia. Rafe siempre ha sido así, pero lo que lo empuja al límite son ellos. Son una constante amenaza, siempre queriendo jodernos. No puedes negar que siempre han estado en medio de todo, y ahora te tienen a ti en medio de esto también."

Elaia se levantó de la cama, enfrentando a Topper con los brazos cruzados. "No voy a dejar que sigan justificando lo que Rafe hace por culpa de los demás. Él tiene que asumir la responsabilidad de sus acciones. No podemos seguir permitiéndole que se salga con la suya solo porque está enfadado."

Topper la miró por un momento, su mandíbula apretada, antes de dejar escapar un suspiro profundo. "Quizás tengas razón," murmuró, su tono más suave. "Pero tampoco puedes negar que JJ y los demás son parte del problema. Están haciendo que las cosas se salgan de control."

Elaia negó con la cabeza. "Si seguimos pensando así, Topper, esto nunca va a parar. Tienes que hablar con Rafe. No más peleas, no más amenazas. Tiene que detenerse."

Topper la miró, en silencio, antes de asentir lentamente. "Lo intentaré. Pero no puedo prometer que Rafe me escuche. Está en una espiral, y no sé si alguien puede sacarlo de ahí."

"Lo sé," dijo Elaia en voz baja, mirándolo a los ojos. "Pero si alguien puede hacerlo, eres tú."

Ambos quedaron en silencio por un momento, y aunque la tensión seguía allí, había una especie de tregua tácita entre ellos. Sabían que lo que estaba ocurriendo era más grande que cualquier rivalidad entre grupos.

Al día siguiente, Topper encontró a Rafe en un bar del puerto, en uno de esos rincones oscuros que solían frecuentar para escapar de las tensiones del día a día. Rafe estaba sentado en la barra, una botella de whisky medio vacía frente a él y el ceño fruncido, perdido en sus pensamientos. Topper lo observó desde la puerta durante un momento, considerando cómo abordar la situación antes de acercarse. Finalmente, decidió que ya era hora de enfrentar las cosas.

"Rafe," dijo al sentarse junto a él en la barra. No era una pregunta ni una acusación, pero su tono serio indicaba que no estaba allí para una charla casual.

Rafe ni siquiera lo miró al principio, se limitó a tomar un largo trago del vaso. Finalmente, dejó la copa sobre la mesa con un golpe seco y respondió, sin levantar la vista. "¿Qué quieres, Topper?"

Topper suspiró, mirando la botella y luego a su amigo. "Tenemos que hablar."

Rafe soltó una risa sarcástica, todavía sin mirarlo. "¿Sobre qué? ¿Sobre cómo todos están en mi contra? ¿Cómo mi vida es una jodida ruina? Porque, honestamente, no tengo paciencia para eso ahora mismo."

"Esto no es sobre ti solo," replicó Topper, manteniendo la calma. "Es sobre Elaia."

El nombre de la hermana de topper fue suficiente para que Rafe finalmente lo mirara. Sus ojos estaban inyectados en sangre, una mezcla de alcohol y agotamiento. "No metas a Elaia en esto, Topper."

"Ya está en esto, Rafe. Tú la metiste," dijo Topper con firmeza. "Anoche, casi la haces pedazos. Y no hablo solo de lo físico. La estás rompiendo emocionalmente con esta obsesión que tienes."

Rafe lo fulminó con la mirada, pero no dijo nada. Topper continuó, aprovechando el silencio. "Escucha, hermano, Elaia no es algo que puedas controlar. No es tuya para poseerla. Y si sigues así, la vas a perder para siempre."

Rafe resopló, sacudiendo la cabeza. "No entiendes nada, Topper. Elaia me necesita, aunque no lo admita. Yo la protejo, yo me aseguro de que no se meta en problemas con esos pogues de mierda."

"Esa es una jodida excusa," replicó Topper, su voz subiendo de tono. "¿Protegerla? Lo que estás haciendo no es protección, es abuso. Lo que vi anoche... no es amor, Rafe. Es obsesión, y está fuera de control."

El silencio entre ellos se volvió tenso. Rafe apartó la mirada, sus nudillos blancos de tanto apretar el vaso. "No puedes entender lo que es sentir que te están quitando a alguien, que están tratando de joderte por todos lados."

Topper sacudió la cabeza, con una mezcla de compasión y frustración. "No, no lo entiendo porque no lo he vivido. Pero lo que sí sé es que te estás perdiendo en esta espiral de odio y venganza. Y no solo a Elaia, sino a ti mismo."

Hubo una pausa pesada antes de que Topper dijera lo que realmente había ido a decir. "Tienes que dejarla ir, Rafe. Dejar de verla como si fuera algo que puedas poseer. Y dejar de meterte con los pogues por pura venganza. Te están arrastrando al fondo, y Elaia está sufriendo por eso."

Rafe giró la cabeza hacia él, sus ojos centelleando con rabia. "¿Dejarla ir? ¿Dejar que esos pogues la arrastren con ellos? ¿Que JJ la meta en su jodido mundo? ¿Es eso lo que quieres?"

"No es eso, Rafe," dijo Topper, controlando su voz para no elevarla. "Lo que quiero es que pares de intentar controlar todo. Que dejes de usar a Elaia como un maldito ancla para tu propia rabia. Si sigues así, no solo vas a perderla, sino que vas a destruirte a ti mismo."

Rafe se quedó en silencio, mirando al frente, con el ceño fruncido. Durante un momento, Topper creyó que había llegado a él, que tal vez, solo tal vez, había logrado atravesar la pared de odio y frustración que lo envolvía.

Pero entonces, Rafe se puso de pie de golpe, derribando su vaso en el proceso. "No necesito tus sermones, Topper," dijo con desdén. "Y no necesito que me digas qué hacer con Elaia. Así que mejor mantente al margen."

Topper también se levantó, intentando mantener la calma, pero sus palabras fueron firmes. "No es tu hermana, Rafe. Es mi hermana, y no voy a quedarme de brazos cruzados viendo cómo la destruyes."

Los dos se miraron, las tensiones entre ellos palpables, pero Rafe finalmente dio un paso atrás. "Haz lo que quieras, Topper. Pero no te metas en mis asuntos."

Sin decir más, Rafe se dio la vuelta y salió del bar, dejando a Topper mirando la puerta cerrarse con un suspiro pesado. Sabía que Rafe estaba demasiado profundo en su espiral para escuchar razones ahora, pero no iba a rendirse. No si eso significaba salvar a Elaia y, de algún modo, intentar salvar también a Rafe de sí mismo.