A mi lado | Naruto Fanfic | KakaHina

Capítulo 7 : ¿Estas bien, Hinata-chan?

Waiver
Los personajes de Naruto no me pertenecen.

Las dos hermanas tras esa escena fueron a la residencia, Hanabi en el camino no paro de humillar a su hermana con feas palabras.

Cuando llegaron a la residencia era silencio absoluto, Hinata sentía su estómago estrujarte de la angustia.

— ¡Padre! —Llamó la menor cerrando la puerta para quitarse las sandalias rápido, Hinata hacia lo mismo pero de forma lenta no queriendo ir hacia la sala donde fue su hermana menor rápido.

Hiashi al escuchar el llamado se levantó de la almohada donde estaba sentado, su vista se posó en su hija menor quién estaba con el seño fruncido, después de ella se hizo ver la mayor quién se adentraba de forma lenta con la mirada baja.

— Pa-Padre, tengo que explicarle algo. —dijo Hinata arrodillandose en el suelo de madera, su respiración se hizo pesada ante la tensión qué había, Hiashi ya de tan solo ver la expresión de las dos sabía que algo malo había ocurrido.

— Creo qué yo debería explicarle lo que vi con mis propios ojos, padre. —Añadió Hanabi inclinándose levemente ante el líder.

El mayor suspiro pensando en que versión creer, no podía descartar el punto de vista de su hija menor, después de todo ella era su confidente.

— Habla Hanabi. — asintió el Hyuga, Hinata apretó sus puños sobre la falda qué cubría sus piernas, sus ojos se fueron cristalizando ante tal injusticia, se sentia sin valor en esa casa, su palabra no valía nada en absoluto tras ser derrotada por su hermana menor hace más de diez años.

Su padre ya ni se interesaba en ella, aún recordaba la vez en la que decidió ser una ninja, Kurenai fue y le preguntó a su padre si estaba dispuesto a dejar que su hija mayor (heredera del clan) corra peligro en las misiones, sin embargo él respondió arrogantemente qué no deseaba saber de ella.

— Buena decisión padre, os contaré.
Fui a supervisar a Nee-san como me has mandado, cuando fui a torre no la encontré allí y decidí ubicarla con mi Byakugan, fue así cuando llegué y la vi con cierto Uc-

Él sonar de la puerta interrumpió a la menor quién suspiró frunciendo el seño levemente, por otro lado el corazón palpitante de Hinata, sus nervios y su interior angustiado se disiparon ante el toque, ella bendecia a la persona que tocado, sin duda estaría agradecida de por vida, ese gran hombre o mujer le había ahorrado la sensación de dolor ante el posible castigo que tendría.

— Voy a ver quién es.  — Murmuró para voltear e ir a la entrada, estaba tan molesta de que la hayan interrumpido justo en el momento exacto, su cara mostraba malagana y molestia, no importaba quién estuviera tras la puerta, la estaría odiando algunos días.

Sin más abrió la puerta, su seño se suaviso abriendo los ojos grandes al ver a un sujeto un tanto alto, este tenía el cabello plateado y piel clara, sus mejillas se tornaron carmesí ante el hombre tan guapo que tenía frente suyo.