II

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Habían despertado algo tardé, primero el albino que el rubio.

Se sentó a ultrajadas en la cama apreciando al joven, se veía tan delicado en contraparte de la actitud prepotente conocida por todo el mundo. Cubrió un poco más el cuerpo de su acompañante y deslizó su mano en su mejilla apreciando la suavidad que ya era familiar, nunca olvidaria esa noche.

El rubio despertó unos minutos después sintiendo la mirada ajena examinándolo, miro al bartender de la noche anterior ahora completamente descubierto e iluminado por los rayos del sol que invadían la habitación. Aún seguía sin reconocerlo, le agrado la forma en que habían pasado la noche, y no lo iba a negar también le gustaba que lo mirase con esos ojos llenos de admiración, sus manos se sentían rasposas pero no le importaba.

No tardó mucho cuando se sentó sobre el regaso del mayor para continuar una sesión de besos la cual fue bien recibida por el contrario. Katsuki estaba en el cielo, rodeado por los brazos del otro y consentido con besos fogosos, sintió como el otro lo detuvo con masajes en la espalda desviando sus besos al cuello hasta solo abrazarlo.

─Katsuki... Tienes que irte. -le recordó el hombre dándole un beso en la mejilla.

No recordaba haberle dicho su nombre de pila, pero con todo el ajetreo de la noche sinceramente no estaba descartada la posibilidad de que se hubiese mencionado, al contrario el hombre no le había mencionado el suyo. Y no le gustó el que le recordará su trabajo de héroe, odiaba salir a trabajar, comenzaba a arrepentirse de tomar aquella decisión en su juventud.

─Dime tu nombre. -pidió casi suplicante en un gimoteo cerca de la oreja del albino.

─Ven a media noche otra vez, hoy. -dijo el chico aprisionadolo de nuevo en sus brazos.

Fue así que se despidieron, el joven héroe fue guiado a la salida por el hombre pasando por el bar donde aún estaba su sudadera la cual tomó para cubrirse al salir.

El chico del bar antes de dejarlo salir le propinó una palmada en los glúteos lo cual lo hizo gimotear. Idiota...

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La Mascota de un HéroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora