smoke [re-versión] © namjin

Capítulo 04.

Capítulo 04:
"Chocolates y enemigos."

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La cafetería estaba llena aquél lunes por el mediodía. Seokjin sentía su cabeza un poco adolorida con todo el ruido de las personas, gracias a sus pocas horas de sueño.

Todo el fin de semana había estado pensando en Namjoon, en el baile que tuvieron, en sus miradas, en su cuerpo contra el suyo, en su fragancia, cada parte del moreno que lo había vuelto loco sólo con una noche.

En toda la mañana sólo lo vió desde lejos, porque tenían diferentes clases. Sólo logró observarlo con su grupo en los recesos o cuando caminaba a otra clase, y no tuvo la valentía de acercarse.

—¿Así que le moviste el trasero?!– rió Jimin a su lado, asombrado por la anécdota que había terminado de contar hacía varios minutos, y por la que se quedó pensando. Park acomodó su pierna sobre la de Jungkook, quién conversaba con alguien más del otro lado.– No te tenía así Kim... nadie que vista de rosa todos los días incluída su mochila, sería capaz de bailar así con el líder de una banda de motociclistas feroces. Sobretodo ésa banda...– comentó, intentando disimular su mueca con eso último.

—Déjalo amor, está bien, el chico debe divertirse y pasarla bien. ¿No es así?– Jeon se unió a la conversación y sonrió mirando al castaño, empujando levemente su puño contra el brazo derecho de Seokjin quién dió otro trago a su jugo de uva avergonzado y con las mejillas encendidas en rojo.

—¡Jinnie! ¿Qué haces aquí? Ya encontré mesa... Oh.– Taehyung había llegado donde ellos al verlos de espalda y reconocer a su amigo, pero en cuánto se voltearon, no contó con que esa cabellera rubia sea específicamente Park Jimin. La mueca en su rostro no se pudo disimular, y el otro sonrió levemente burlón.

—Kim Taehyung... Ha pasado rato desde que vienes a esta zona de la cafetería.– apretó los labios con un pequeño asentimiento, sacando el pitillo que se posaba antes en éstos y mirando al chico de arriba a abajo.

Tae quiso resoplar y decirle todas esas cosas que tenía atoradas en su garganta hacía mucho, pero se contuvo y tragó todo, dejando su semblante serio.

—Park.– contestó tosco a modo de saludo corto, se acercó a Jin y tomó su muñeca, afianzando el agarre cuando el rubio le sonrió maquiavélico. Alzó al castaño del asiento mientras éste los miraba desconcertado, sin entender por qué esa tensión tan palpable lo estaba haciendo sentir incómodo.– Vámonos Jinnie.

—Claro, huye como lo hiciste antes... Cobarde.- Jimin murmuró bajito lo último, volviendo a poner el cigarrillo en sus belfos, pero en cuanto desvió la mirada sintió un ardor en su mejilla de parte del otro y enseguida volteó a ver a Taehyung, asombrado y furioso porque se había dignado a volver y darle una cachetada que dejó rosado su costado de la cara, antes de irse rápidamente con Seokjin hasta su mesa del otro lado del lugar.– Mmh... así que así serán las cosas Kim, ¿huh?
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—¿Tae? ¿Qué fué todo eso, por qué te llamó cobarde y lo golpeaste?– Seok aún seguía confundido, mirando ocasionalmente a la mesa de los tigres, donde Jimin era mimado por su novio en la zona que Taehyung había golpeado.

—No importa Jin.– respondió serio, comiendo con la vista concentrada en un punto blanco de la mesa.

—Taehyung...

—Ugh.– refunfuñó dejando en la bandeja su hamburguesa, limpiando con el dorso de su mano sus labios y comisuras sucios y luego mirando al menor desconcertado.– Te contaré, pero no debes divulgarlo, ¿bien? Yo no sabía que eras cercano a Park, así que trata de no comentarlo con él.