don't watch that video III // michael clifford

III

Michael me metió en su coche y cerró la puerta, dando una vuelta al coche para entrar por el lado del piloto.

"¿Puedes quitarme esto? Ya no me voy a escaquear de la fuga." Aseguré enseñando mis muñecas.

Él suspiró, pero acabó abriéndolas. Segundos después, cerró las puertas con seguro, esperando que me iba a ir.

Yo bufé y él arrancó el coche mientras yo mirabs mis muñecas, mordiendo mi labio al ver lo rojas que las tenía. Michael las había apretado demasiado.

"¿No me vas a pedir perdón?" Lo miré.

"No." Negó con la cabeza, manteniendo su mirada en la carretera.

"Oh." Murmuré, restándole importancia.

"No te lo tomes a mal, llevo estos tres años sin medicarme. Ahora mismo soy como era cuando me conociste." Contestó y no pude evitar asustarme.

"Así que ahora estarías dispuesto a volver a hacerme daño." Deduje.

"Eso es." Asintió.

"¿Lo vas a hacer?" Pregunté y él me miró durante unos segundos antes de volver a mirar hacia la carretera.

"Depende de cómo te portes conmigo." Hizo una mueca.

"Así que.. ¿ya no te importo nada?" Pregunté asustada de lo que podría ser su respuesta.

"Claro que me importas." Contestó como si estuviera diciendo lo más obvio del mundo.

"Entonces, ¿por qué me harías daño?" Pregunté.

"Porque es mi naturaleza." Contestó "Todo el tiempo que pasamos juntos estuve sintiendo un deseo enfermizo de hacerte daño, y si lo hiciera no me arrepentiría." Aseguró.

"Pero, me dijiste que yo te ayudaba a reprimir esos sentimientos." Recordé.

"Reprimirlos, no eliminarlos." Aclaró "Lo que me pasaba al estar contigo era que cambiaba esos sentimientos por.. otros." Dijo, bajando el volumen de su voz cuando dijo la palabra otros.

¿Otros? ¿A qué se refería? ¿Michael sentiría algo por mí?

«Sí, ganas de matarme.»

No sabía qué decir, así que me quedé callada hasta que volví a escuchar su voz.

"Sí, Stella, me enamoré de ti." Admitió y me quedé completamente paralizada.