Reviví después de mi trágica muerte.

Capítulo 18

Los reyes habían llegado al oasis por invitación de Dazai, quería sentir que no estaba haciendo las cosas mal, llegaron allí junto a algunos magos para administrar el mana y poder estar más tranquilo tras alguna emergencia, poco le duro realmente cuando esa misma noche, el mago apareció en su oficina totalmente herido - ¿Qué ocurre? – cuestiono preocupado,

- Señor, fue terrible, un basilisco llego, los devoro a todos, los reyes han perecido, señor ha sido terrible

Osamu miro aquello preocupado – recupérate primero

- No señor, no tengo mucho tiempo. No creo poder sobrevivir, pero debemos dar aviso al príncipe, sus padres

Osamu ni si quiera lo pensó, solo tapo su boca, apretó fuerte, tan fuerte que el débil mago pronto se quedó sin aliento. Osamu cerro sus ojos y suspiro. – Esto... no era parte del plan de Odasaku...

Esa noche, Osamu llamo a Chuuya al castillo matrimonial, entro sin ser detectado y lo miro – Osamu ¿Qué te ocurre? – pregunto abrazándolo

- Ya no puedo más Chuuya, no puedo con esto. No quería casarme, no quería hacerles daño, termine matándolos, Chuuya los mate

- Tranquilo Osamu, estoy contigo...

Pasaron unos minutos abrazados cuando Chuuya se separó – Chuuya, espera

- Vamos Osamu, hagamos lo de siempre, ser compañeros de vida

Dazai limpio sus lágrimas y se levantó – sí, ¿Qué hacemos?

- Llevare el cadáver primero, tu ¿sabes imitar la letra de los difuntos reyes?

- Algo así, he visto lo suficiente

- Bien, escribe una carta de parte del rey, no dejemos que tu esposo se entere

- De acuerdo.

A la mañana siguiente, Atsushi recibió la primera carta de parte de sus padres. – Osamu, Osamu, mis padres la están pasando muy bien en el oasis – dijo abrazándolo, Osamu sintió asco – eres el mejor cariño

- Me alegra que te gustará tanto – menciono – es bueno por parte de todos.

- Siii, dicen que es hermoso, debemos ir a visitarlos

- Quizá luego, Atsushi, mañana salgo en una expedición

- ¿tienes que ir?

- Si, necesito que te quedes ¿sí?

- Lo sé – suspiro - ¿Cuándo saldremos de aventuras tú y yo?

- Pronto, debemos resolver algunas cosas

- De acuerdo.

Por la mañana, Osamu se despidió de su esposo y partió, claro, los soldados iban guiados, pero el mago hizo lo suyo, era una simple replica de Osamu, el ahora rey consorte llego a su ducado donde Chuuya lo esperaba – Osamu, volviste

- ¿Cómo te va manejando todo? – pregunto

- Perfecto, justo como querías, nadie sabe que tus padres han muerto

- Majestad, tengo todo listo para continuar, he creado la cura para los Akutagawa

- ¿seguro Tachihara?

- Señor, le soy totalmente fiel a usted, pero el duque merece pagar por dejar de lado al ducado, y para eso, necesito que viva. De acuerdo Tachihara. Continuemos con esto