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Daba grandes bocados a los fideos, no tenía mi teléfono a mano por lo que comer estaba siendo muy aburrido, terminé de almorzar y me levanté de la mesa, llevando el plato a lavar.
Muzan no había hecho presencia desde que se fué arriba, supuestamente durmiendo. Y digo supuestamente porque no confío en ese hombre (Es enserio? No confías pero aceptaste ir a la cama con el, que graciosa ja ja ja).

Entonces decidí ir a ver por el hombre, tenía que decirle que me deje ir, tenía que volver a casa, al instituto... No podía continuar así, me podrían quitar mi posición como delegada de la clase!

—Un momento... Siento que hay algo mal en esto—

Algo en mi interior me decía que estaba pensando mal de alguna manera, pero por qué? Es que acaso me estaba equivocando con culpar a otro?

—No, no estoy equivocada, claramente fue     culpa suya el...— Me di cuenta que había llegado a la puerta de la habitación—

Sin tocar antes entré, caminaba despacio para evitar hacer ruido en caso de que realmente estuviera Muzan allí durmiendo y para mi sorpresa...

—De verdad está dormido— Me acerqué para mirarlo mejor—

Solo podía preguntarme algo ¿De verdad este es el mismo hombre con cara de sádico que me dejó en el estado en el que estoy?... Se ve tan calmado, relajado. Allí pude mirarlo mejor, notar que ese atractivo era mucho mayor si lo veías tan detenidamente.

(¿Qué estoy haciendo? Tengo que buscar mi teléfono y salir de aquí)

Me volteé dándole la espalda al hombre y comencé a buscar entre mis cosas, cajones y demás. Pero no lo hayaba en ningún lado.

(No estará...? No, imposible, no habrá sido capaz de guardarselo)

Me giré a ver al hombre y me acerqué con cuidado, en cuanto mi mano estuvo cerca de él repentinamente Kibutsuji abrió sus ojos y me tomó de la muñeca con brusquedad y mucha fuerza.

—Agh! Espera espera!!..—

—Ah... Agradece que no reaccioné a como normalmente lo hago, ya tendrías el brazo roto ahora mismo—

Me congelé y puse blanca del susto, me soltó de su agarre y me fregue la muñeca por el ardor que me había quedado.

—L-Lo siento ... No quise asustarlo, solo...estaba buscando algo que me pertenece—

—¿Y acaso lo tengo yo?— alzó una ceja sin comprender por qué estaba buscando en el—

—No estoy segura por eso quise buscar aquí pero te desperté— me senté en la cama a un lado de el— Perdón por eso Muzan—

Parecía que algo en mi hizo que su mirada se relaje, sonrió pícaro y se sentó quedando cara a cara conmigo.

—Te perdono solo porque eres una ternura— Apretó mis mejillas con una sola mano— Me encanta tu mirada llena de culpa—

(Y justo cuando empezabas a ser agradabel tuviste que seguir ladrando...)

—Quiero irme— dije apenas me soltó el rostro—

—No— Se acostó nuevamente poniendo ambos brazos debajo de su cabeza— No puedo dejarte salir así como estás—

—No puedes contenerme aquí esto... Esto es considerado secuestro!—

—Yo te obligué a venir?— preguntó burlón—

—No pero!-... Pero— bajé la voz y me quedé pensativa— Fui yo…—

•《𝐿𝑎 𝐹𝑙𝑜𝑟 𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝐶𝑎𝑢𝑡𝑖𝑣𝑎》• Muzan y Tú. [En proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora