A veces me pregunto que tipo de amor eres. ¿Amor de amor? ¿Amor de dolor? ¿Amor para transformarse en recuerdo? Quizás eres ese amor que llega sin que lo inviten. Sin que le abran la puerta. Ese amor que se atrinchera en el corazón y se queda a vivir en el alma.
Y aunque todavía no sepa que tipo de amor eres, realmente no importa. Porque lo que sé es que me gustas. Sí, me gustas, como para que tu amor venga a quedarse, a hacer huellas, a dibujar caminos, a sembrarse en mi tierra y florecer bajo mi piel.
Es que quiero que seas más que un amor. Quiero que seas mi amor. Amor para amarte todos los días. Amor para hacerlo, para hacerlo noches, para hacerlo días, para hacerlo un mañana. Un amor para mirarte a los ojos y vivirlo viviendo.
