24 | Un tɾɑto

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—Esta tardando mucho— Clarke hablo con ansiedad al no recibir señales

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—Esta tardando mucho— Clarke hablo con ansiedad al no recibir señales

—Se tardarán lo necesario— Suspire mientras observaba la gran puerta de metal

—¿Que harás cuando esto acabe?— Lexa hablo sin dirigirme la mirada y fruncí mis cejas sin saber que responder

—No tengo idea— Suspire con cansancio

—¿Que es lo que quieres?— Lexa me dio una corta mirada

—No quiero nada más que no sea salvar a mi gente no puedo pensar en mas— Le di una corta mirada y la regrese a la puerta

—Puedes acompañarme a la capital, tu hermano esta decidió a ser uno de los nuestros y tú también lo eres Leeann puedes ser mi segunda. Polis cambiará tu forma de vernos— Lexa me miro e hice una mueca

—Ya lo hice Lexa— Le di una sonrisa ladeada y ella me correspondió con otra leve sonrisa

Un par de balas caían desde mi más alto de la montaña pero nada que nos hiriera hasta que las luces de la puerta nos señalaron que estaba listo, era nuestro momento.

—Lo hicieron— Sonreí con emoción y sostuve el control entre mis manos

—Un minuto desde ahora.

—Por los que perdimos— Mire a Lexa y puso el control entre nosotras

—Y por los que vamos a salvar— Acompleto ella y tomamos el control juntas

Presione el botón pero no ocurrió nada.

—¿Que pasa por qué no funciona?— Lexa miro preocupada a la puerta

—Estan bloqueandonos debo acercarme— Comenzé a caminar presionando el botón pero una lluvia de balas me recibió. Lincoln me sostuvo de la cintura escondiéndome detrás de una piedra

Lexa ordeno algo pero de igual manera todos eran recibidos por la lluvia de balas prohibiendo el paso.

—Si me acercó lo aré manualmente— El padre de Millers se acercó a nosotras

—No no pude acercarse— Clarke dijo preocupada negando con la cabeza

—Por Nate debo intentarlo— Hablo con firmeza y asentí levemente con la mirada

Un grupo de terrestres cubrieron al hombre con sus escudos metálicos.

—30 segundos— Miraba el reloj del control con desesperación y poco a poco el grupo del hombre calló al piso

—Ayaremos otra forma, tranquila— Lexa sustuvo mi mano al notar mi ansiedad

—No hay otra manera tú lo sabes— Clarke hablo con preocupación

—Puedo hacerlo— Le entregué el control a Clarke y pedí el arco que portaba Lincoln. ¿Cómo vas a disparar el arco con un brazo mal? Pues el dolor del brazo se va pero mis amigos si se quedan dentro de esa maldita montaña jamás regresarán

Nocturna • 𝐁𝐞𝐥𝐥𝐚𝐦𝐲 𝐁𝐥𝐚𝐤𝐞 •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora