soy el fantasma de la casa que me habita.
nauseabundo, vomito los recuerdos. ya no me cobijan.
manifiesto con los dedos un futuro que tirita.
¿qué le queda al vagabundo? un porvenir que lo asfixia.
quisiera llorar pero lo evito. a veces sueño con cisnes y levito,
sueño que puedo alcanzar las motas de polvo
y colocarlo todo
donde debe estar.
me gustaría ordenar esta casa,
me gustaría irme de este lugar.
soy un fantasma corpóreo, pueden pero eligen no tocar.
tan solo pululan a mi alrededor, son moscas asentadas en la basura
que ellos mismos botaron al piso.
y deseo, deseo tanto escapar de esta casa
porque me siento finito. me derrito,
me percibo como ente nauseabundo
y vomito
los recuerdos que ya no puedo
sostener con estos dedos.
e intento, una vez más lo intento,
intento acomodar los muebles,
coleccionar el polvo en bolsas plásticas,
recoger las hojas de la esquina.
lo intento pero mi piel ya no puede seguir.
lo intento pero mi voz desea salir,
quiero gritarles en la cara:
Con qué puta cara me reclaman
si el espacio
se ve así, ¡se ve así!
Esto es una mierda, sáquenme de aquí.
Y yo
sigo siendo fantasma,
soy corpóreo, pueden pero eligen no tocar,
pueden pero eligen ignorar,
pueden pero eligen escapar.
Los conozco, son iguales a mí,
son iguales a Eliot siendo poseedor de mi cuerpo.
Lo sé, los comprendo,
¿por qué dañarnos más?
Quiero cambiar
e intento
mejorar los procesos,
juntar motas de polvo
en bolsas plásticas
y acomodar mi cama
dos veces al día.
Pero ellos
no quieren
verme.
Soy un fantasma y levito
porque ellos no me pueden levantar
y yo no soporto el peso,
no soporto el aroma ni el peso
de este cansado lugar.
Y hay hojas secas
que no han querido levantar
y hay papeles llenos de mierda
atorados en la esquina
y hay una voz que me zumba,
dice que solo soy un estorbo
pero cómo estorbar
cuando soy lo que evita
que esto se vaya a derrumbar.
Soy un fantasma y levito,
me voy al infinito en abstracción celular;
pienso en ello, solo me puse los audífonos
porque no quiero que me escuchen llorar.
Al menos yo escondo mis lágrimas
y no clavo el puñal...
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Cuando mis manos se marchiten, quedará esto
No FicciónCuando mis manos se marchiten quedará esto que nunca guardo por dentro. Siempre confieso mis pecados más funestos. * Poemario corto, Infrahumano Volumen II. * Funcionan como extras de Autorretrato. * Si bien esta obra no presenta advertencias, se r...