Skinny Jeans ➳ Justin Bieber

Capítulo siete.

❝TIERRA TRÁGAME❞

CASSIE HILL

Mire por la ventana una vez más para cerciorarme si ya estábamos cerca del campo, Miley y yo ya estábamos regresando de la fiesta, mire mi reloj de muñeca e hice una mueca, eran las dos de la mañana, gemí.

— ¿Que pasa?— me pregunto Miley ante el gesto que había hecho. La fulmine con la mirada, odiaba que aveces actúe como si no le importará nada.

— Pasa que ya son las dos de la mañana y por si no sabias tenemos clases muy temprano mañana— agite mis manos exasperada.

— Míralo por el lado bueno, al menos pudiste hablar con Justin— dijo picara y yo rodé los ojos, era cierto pero no iba dar mi brazo a torcer, siempre lo hacía— anda Cassie no seas aburrida y cuéntame qué pasó.

— Solo hablamos un rato, creo que no duro más cinco minutos.— me encogí de hombros— Me invitó un trago y después me habló de la rara combinación de mi vestido y mis converse, después se fue a donde estaba un chica rubia, se veía tan...— apreté mis labios para que no se me escapara una palabrota.

— ¿Una chica rubia?— me pregunto bastante interesada y luego me miro incitándome a que diga la palabra que sabía que iba a decir.— Vamos Cassie, yo sé que quieres decirlo... se que quieres decir que...— me incito.

— Se veía como una perra.— solté y Miley soltó un pequeño grito.

— Esa es mi chica, ya vas aprendiendo amiga— dijo palmeando mi hombro. Suspire y me tape la cara con mis manos, era patético que sintiera celos ya que ni siquiera era algo de Justin, solo le había hablado una vez.

Cuando llegamos al campus salí rápidamente del taxi y me dirigí a mi habitación, solo quería dormir. Me acosté en la cama cuando ya me había puesto mi pijama y cerré los ojos tratando de descansar. En eso me di cuenta de lo afortunada que había sido al no encontrarme a nadie cuidando el campus ya que casi siempre habían guardias cuidando que nadie salga ni entre a estas horas.

— Oye me debes trece dólares.— Miley entro a la habitación y prendiendo la luz, gemí ante el contacto que hicieron con mis ojos.

— ¿Porque? —pregunte sentándome en la cama mientras parpadeaba varias veces para que mis ojos se adaptarán a la luz.

— Porque se supone que tenias que pagar tú el taxi, pero como la señorita se fue casi corriendo, lo tuve que pagar yo. El trato era que yo pagaba el de ida y tú el de regreso. Ahora me quede sin almuerzo mañana— se cruzo de brazos, diablos, era cierto.

— Lo siento,— me acosté otra vez y escondí mi cara en la almohada, tenía dinero en mi bolso pero es estos momentos lo menos que quería era pararme y ponerme a buscar el dinero, que flojera— te lo pago mañana.

— Bien.— la escuche decir. Cerré mis ojos y fruncí el ceño minutos después al darme cuenta de que la luz nunca me dejaría dormir en paz.

— ¿Podrías apagar la luz? Trato de dormir, ya es tarde— le dije un poco enfadada, cuando tenía sueño, mi actitud cambiaba, y digamos que me volvía gruñona y quejica.

— No— negó. Jodida Miley ¿Que no me deja dormir en paz?

— ¿Porque?— le pregunte aún con los ojos cerrados tratando de controlar el enojo que estaba creciendo en mi, solo quería dormir ¿Era mucho pedir?

— Porque Chaz vendrá en un rato a verme, dejamos algo pendiente en la fiesta... ya sabes.— me dijo como si nada, me senté rápidamente en la cama.

— ¿Que?— casi grite— va a venir solo, ¿no? —y descubrí la respuesta cuando se mordió el labio nerviosamente, me pare mirándola fijamente.

— Estoy casi segura de que no vendrá con Justin.— apretó sus manos en puños esperando mi reacción pero yo me había quedado helada. La puerta sonó y mi corazón empezó a latir rápidamente— Tranquila, según Chaz, Justin tiene entrenamiento por lo cual probablemente ahorita este en su dormitorio durmiendo como un bebe.

Miley camino hacia la entrada y cuando la abrió dejo ver a Chaz... y a Justin, maldita sea. Justin dirigió su mirada hacia mi y luego a lo que llevaba puesto, el lado derecho de su labio se elevó dejando ver una media sonrisa. Mis mejillas se tiñeron de color carmesí.

¿Porque? Pues mi pijama consistía en un polo de ositos y un pantalón que tenía a Minnie Mouse de estampado, aveces pensaba que Miley me odiaba.

Tierra trágame.