tiago trabaja como abogado en la ciudad de buenos aires, capital el mismo vive en una casa un tanto moderna junto a su madre, a pesar de tener 21 años por distintas circunstancias tomó aquella decisión en el pasado.
el mismo era bastante exigente consigo mismo, por más que trabajase las mismas horas que el resto de sus compañeros, podría jurar que él era el que más cansado terminaba, pero era por su sobreexplotación que se hacía a si mismo, porque creía que lo que hacía era "insuficiente"
por suerte en su trabajo le pagaban un sueldo justo, a veces un poco más que al resto por el motivo anteriormente mencionado
aunque es un tipo serio y que se dedica al trabajo la mayor parte del día, casi siempre que se le presenta la oportunidad pasaba tiempo con su madre, sacándola a comer a algún lado, o cosas así
era atento y cariñoso, pero solo con determinadas personas.
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hace un par de días se había hecho viral una noticia en el país, la cual informaba la llegada de astrónomos extranjeros que iban a hospedarse en la capital por un tiempo indefinido, para realizar alguna a que otra observación y con suerte descubriendo algo nuevo que los favorezca.
por darles el permiso y además un lugar en el cual trabajar, decidieron a cambio dejar que el público interesado pueda ingresar de forma gratuita a dicha ubicación para así contarles un poco de lo que sería su trabajo en si, con imágenes, con palabras, afiches, telescopios, entre otros materiales a su alcance.
se decía que en total el grupo era compuesto por seis hombres, tres con procedencia española, dos alemana y uno proveniente de rusia.
en si el grupo manejaba el español y el inglés, además de su propio idioma claramente.
esto no era de mucha importancia para el morocho, no era un tema en el que esté interesado realmente así que, muchas atención no le dió.
hace un par de días había salido de su trabajo un poco más temprano de lo que acostumbraba, pero eso no quitaba el hecho de estar cansado.
caminaba de vuelta a su casa, ya era de noche pero el tráfico persistía
aunque estaba más concentrado en sus pensamientos, sumidos en ellos mientras caminaba con sus auriculares puestos, escuchando música a un volúmen bajo, con su mirada fija en el piso
tan consumido estaba que se percató tarde de que había impactado contra otra persona, por suerte no de una manera muy brusca
aunque se sintió peor al notar que se trataba de un niño de quizás unos 4 años, el cual estaba sentado en el piso lloriqueando.
