Capítulo -12-

26 4 0
                                    

Aarón miró las escaleras nuevamente antes de finalmente intentar bajar apoyándose en las muletas.

—Lo estás haciendo bien, sigue así— alentó su papá que estaba solo unos escalones más abajo preparado para sostenerlo si se tropezaba. —Solo un poco más de fuerza.

—Tengo tanta fuerza como un calamar, papá— dramatizó Aarón mientras seguía bajando las escaleras.

Al llegar abajo Aarón respiró de forma agitada y se sentó en el pequeño sillón junto a las escaleras para poder descansar un poco. Antes de que Aarón pudiera terminar de recuperar el aire el timbre sonó y casi quiso matar a Brad por ser tan puntual.

—¡Hola, Bradley! — saludó animadamente Rose en cuanto abrió la puerta.

—¿Qué tal, señora Lewis? — Brad le sonrió de forma amistosa a la mamá de Aarón y luego miró al padre de Aarón antes de presentarse. —Bradley Jenkins, un placer conocerlo, señor Lewis.

—¿Jenkins? — dijo el papá de Aarón recibiendo el apretón de manos y luego recibiendo un codazo por parte de su esposa. —Arthur Lewis, un placer.

El padre de Aarón miró a su esposa de forma interrogante por el golpe, pero ella solo le hizo una seña de que luego le explicaría.

—Con Aarón saldremos de la ciudad, espero no haya problema con eso.

—No me dijiste esa parte— se quejó Aarón, pero Brad ni siquiera se molestó en verlo.

—No deberíamos permitir eso porque Aarón está castigado...— habló el papá de Aarón, pero fue interrumpido por su esposa.

—Pero no hay problema porque es una salida académica— dijo Rose. —Así que vayan tranquilos, conduzcan con cuidado y hagan lo que harían adolescentes normales.

Aarón se cubrió el rostro con las manos intentando ocultar la vergüenza que le provocaban sus padres y luego se levantó para salir de la casa dejando a Brad atrás.

Escuchó como Brad se despedía de sus padres mientras él bajaba los escalones del pórtico con todo el cuidado que podía, una vez que empezara a nevar no podría salir con las muletas ya que podría resbalarse.

—¿Quieres ir en el asiento de adelante o en el de atrás? —preguntó Brad cuando ambos estuvieron junto a la espectacular range rover color blanco de Brad.

—¿Este es tu auto? — Aarón preguntó impresionado.

—Creí que la habías visto en el estacionamiento de la escuela— dijo Brad confundido. —Fue un regalo de cumpleaños de parte de mis hermanas mayores.

—No te presto tanta atención como tú crees, de verdad tienes un complejo de superioridad muy preocupante, cariño— dijo con el mismo tono burlón que Brad usaba con él. Se sostuvo con una sola muleta y abrió la puerta del asiento del copiloto. —Guárdalas por mí, ¿quieres? Te daré una propina de un dólar al final del día.

Brad recibió las muletas y permitió que Aarón cerrara la puerta con demasiada fuerza. Suspiró derrotado y guardó las muletas en el maletero antes de finalmente subir al asiento del conductor y ponerse en marcha hacia su destino.

Desde la ventana de su casa los padres de Aarón veían con "disimulo" lo que sucedía entre los dos chicos antes de marcharse.

—¿Segura que es el hijo del alcalde? Creí que era mayor— dijo Arthur cerrando la cortina.

—Él mismo me lo dijo, incluso me encontré con Laura en el ayuntamiento y me confirmó todo— respondió Rose. —Es lindo, ¿no crees? Yo creo que terminarán juntos.

Ni que fueras tan especialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora