¡Hola a todos!
Aquí les traigo el tercer capítulo de mi fanfic donde Naruto continúa su aventura en Themyscira. En esta entrega, profundizamos en la relación que ha ido construyendo con Calíope, una Amazona que, al igual que él, enfrenta sus propios desafíos emocionales. Mientras tanto, Diana observa desde la distancia, lidiando con sus propios sentimientos complicados.
El capítulo explora cómo Naruto intenta ayudar a Calíope a superar su tristeza, y cómo ambos desarrollan una conexión especial en medio de sus luchas personales. También es un momento crucial para Naruto, quien comienza a sentir la presencia de Kurama nuevamente, lo que promete traer cambios significativos en su vida.
Agradezco a todos los que han estado leyendo y apoyando esta historia. Aunque no he recibido comentarios, estoy aquí para seguir mejorando mi escritura y ofrecerles una historia emocionante. Cualquier sugerencia o feedback que puedan tener es muy bienvenido.
¡Espero que disfruten este capítulo! ¡Gracias por seguir esta aventura conmigo!
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El tiempo en Themyscira había permitido a Naruto y Calíope construir una relación profunda. Sin embargo, no todo era tan sencillo. Diana, ahora una adolescente, observaba desde la distancia, sintiendo un torbellino de emociones mientras su maestro y Calíope compartían momentos juntos. En su corazón, había una mezcla de admiración y celos. Aunque trataba de ocultar su enamoramiento por Naruto, cada vez que lo veía sonreír a su lado, un nudo se formaba en su estómago.
Mientras tanto, Naruto se sumergía en su nueva vida, entrenando a las Amazonas y fortaleciendo su vínculo con Calíope. Sin embargo, a pesar de los momentos felices, había una sombra que lo acompañaba: la ausencia de Kurama. Años habían pasado desde que el zorro de nueve colas se fusionó con el chakra de sus hermanos y desde entonces, Kurama había permanecido en un profundo sueño, sumido en la tristeza por la pérdida de su familia.
Naruto a menudo se encontraba solo en sus pensamientos. Durante las noches, al mirar las estrellas, recordaba los tiempos difíciles en el mundo shinobi y cómo había perdido a tantos seres queridos. Sin embargo, nunca había encontrado el valor para hablar con Kurama, sintiendo que su amigo necesitaba su tiempo para sanar.
Una tarde, mientras entrenaban en el claro del bosque, Naruto se dio cuenta de que Calíope luchaba con un desafío particular. Ella se frustraba al intentar dominar un nuevo movimiento, su espíritu rebelde a menudo se interponía en su progreso.
—Calíope, respira y relájate. —le sugirió Naruto—. No es solo fuerza; también se trata de técnica.
Ella lo miró con un destello de determinación en sus ojos.
—No necesito tus consejos, Naruto. Puedo hacerlo sola.
Diana, observando desde un lado, sintió un pequeño revuelo en su corazón. Ella sabía lo fuerte que era Calíope, pero también lo que su maestro significaba para ella. Sin embargo, no pudo evitar sentir un destello de celos al ver cómo Naruto le ofrecía su apoyo.
—Quizás deberías intentar enfocarte en lo que realmente importa —intervino Diana, intentando suavizar la tensión—. La conexión entre cuerpo y mente es esencial.
Calíope rodó los ojos, pero había un matiz de agradecimiento en su mirada hacia Diana. Naruto notó la dinámica entre ellas y, aunque apreciaba el apoyo de Diana, sintió que había una línea delgada que no quería cruzar.
Esa noche, después de un largo día de entrenamiento, Naruto se sentó junto a la orilla del mar, la brisa fresca acariciando su rostro. Calíope se unió a él, mirando las olas romper suavemente contra la playa. Había un silencio cómodo entre ellos, pero la tristeza de Naruto era palpable.
—¿Por qué estás tan pensativo? —preguntó Calíope, rompiendo el silencio.
—Solo... reflexionando sobre el pasado. —respondió Naruto—. A veces, siento que no he superado todo lo que perdí.
Calíope lo miró con compasión.
—No tienes que cargarlo solo. Todos hemos perdido algo. Pero también hemos encontrado una nueva familia aquí.
Naruto sonrió levemente, pero el peso de sus pensamientos era difícil de ignorar. Su mente se desvió hacia Kurama, aún dormido en su paisaje mental. Sentía la ausencia de su compañero, como una parte de sí mismo que faltaba.
Esa misma noche, mientras las estrellas brillaban intensamente, un cambio ocurrió en la mente de Naruto. Una chispa de energía comenzó a crecer, y en el vasto paisaje mental que compartía con Kurama, algo despertó. La figura del zorro de nueve colas, siempre presente, comenzó a transformarse.
Naruto sintió una oleada de esperanza mientras se acercaba a la forma del zorro. Era un espectáculo de colores, un zorro que brillaba con diez tonalidades diferentes, representando la energía de todos los hermanos de Kurama. Con un rugido suave, el zorro comenzó a cobrar vida, sus ojos abriendo lentamente.
—¿Kurama? —llamó Naruto, sintiendo una mezcla de emoción y temor.
Finalmente, el zorro se despertó, su forma radiante llenando el paisaje mental de Naruto.
—Has sido fuerte, Naruto. —dijo Kurama, su voz resonando con una calma profunda—. He estado dormido, pero ahora estoy aquí.
El alivio invadió a Naruto, y por un momento, todas las penas que había cargado parecieron desvanecerse. Pero también había algo más: la necesidad de entender lo que Kurama había pasado.
—¿Por qué no has hablado? —preguntó Naruto, su voz cargada de emoción—. Te he extrañado.
Kurama miró a Naruto con comprensión.
—La pérdida duele, Naruto. Todos decidimos descansar, cansados de la lucha. Pero aquí, en este lugar, encontré la fuerza para volver.
Mientras tanto, en el mundo real, Calíope sentía una extraña conexión con Naruto. No sabía por qué, pero en ese momento, algo en su interior le decía que debía apoyarlo, que su relación estaba destinada a ser algo más. Sin embargo, también sentía la presencia de Diana, quien, a pesar de sus intentos por ocultar su enamoramiento, estaba siempre cerca.
Con el tiempo, la relación entre Naruto y Calíope floreció. Cada día, se enfrentaban a nuevos desafíos juntos, y la confianza entre ellos creció. Pero el dilema de Diana continuaba, y la tensión entre sus sentimientos y su deseo de ver a Naruto feliz se hacía cada vez más complicada.
A medida que el ciclo de entrenamiento y aventuras continuaba, el vínculo entre Naruto y Calíope se profundizaba, y la llegada de Kurama marcó un nuevo capítulo en sus vidas. Juntos, tendrían que enfrentar no solo las amenazas externas, sino también los propios deseos y temores que cada uno llevaba en su corazón.
Con la presencia renovada de Kurama, Naruto sintió que el futuro era más brillante, pero aún había sombras que explorar. La conexión entre todos ellos estaba destinada a ser más compleja, y cada decisión los llevaría más cerca de su destino.
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¡Hola a todos!
Quiero agradecerles sinceramente por leer este tercer capítulo. Me disculpo por la corta duración de esta entrega, pero prometo que el próximo capítulo será el más emocionante hasta ahora. Estoy trabajando arduamente para ofrecerles momentos llenos de acción y emociones que desarrollarán aún más la historia de Naruto x Dc
Aprecio mucho su apoyo y comprensión. ¡Gracias por seguir esta aventura conmigo! Estoy ansioso por compartir lo que viene a continuación. No olviden dejar sus comentarios y escrivir que les parecio
4o mini
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El último Shinobi en DC
FanfictionNaruto Uzumaki, el último shinobi, se encuentra en el universo DC tras la devastadora Cuarta Guerra Mundial Shinobi. En la isla de Themyscira, hogar de las Amazonas, busca redención y un nuevo propósito. Mientras forma lazos con Calíope, una guerrer...