En una sala grande de cine, se encuentran los asientos divididos a la mitad, en la parte izquierda van los miembros relacionados a la Marine, mientras que en el lado derecho se encuentran los delincuentes a los cuales se les intentó asesinar minutos atrás...
Los pocos civiles que hay se encuentran del lado de los Marines en su mayoría protegidos solemnemente.
Nadie comprendía bien cual era el sentido y la lógica de aquel sitio al cual habían sido transportados de la nada como por arte de una magia desconocida para todos, la poca información que pudieron obtener era la tarea que todos tenían que hacer:
Reaccionar.
¿A qué exactamente? Aún no lo saben, pero tratan de cambiar el ambiente e ignorarse mutuamente a pesar de la gran tensión palpable del lugar, leyendo una nota que indicaba el orden de los asientos y también unas pocas, pero simples reglas:
_No pelear_
_No escapar_
Y por último, pero menos importante...
_No dejar de ver la pantalla_
El ambiente era por lo menos incómodo, habían tantos piratas que se conocían de alguna u otra forma al igual que marinos y civiles que nadie sabía que hacer, planeaban hablar justo cuando pasó algo importante que al mismo tiempo era la razón por la que todos allí se conocían de alguna manera:
Monkey D. Luffy acaba de aparecer en medio de la sala, no vino solo, simplemente aún no sé da cuenta de quien fue a parar junto a él en ese extraño lugar.
- ¡¿Eh?! ¿Chicos dónde-...? ¡Oh! Ahí están, Zoro, Sanji, Nami, Robin, Brook, Franky, Chopper, Usopp, Jimbe. - al principio, todos veían a un Luffy sorprendido y preocupado por la repentina desaparición de sus nakamas, sin embargo volvieron a ver esa características sonrisa crecer en su rostro de goma una vez que se dió la vuelta y vió a su adorada tripulación, aunque estos no se acercaron como se esperaba.
"¿Mmmm?, ¿qué pasa, por qué todos me miran así?, ¿tendré algo en la cara?"- Luffy.
"Esto tiene que ser una maldita broma... Esto no puede estar pasando, él está muerto ¿Cómo es qué lo estoy viendo?" - Garp.
- Luffy. ¿Eres tú? - oh mierda, ahora el capitán de los sombreros de paja comprendía porque la expresión de sorpresa de todos, al fin y al cabo, ¿quién en el mundo no sabía que Portgas D. Ace había sido ejecutado hace dos años en la guerra de Marineford? Todos estaban atónitos, ¿cómo era posible que el difunto puño de fuego, hijo del rey de los piratas; Gold D. Roger estuviera aquí vivo junto a ellos? Se supone que era imposible y el rostro de Luffy se volvió pálido al instante.
- ¿A-A-Ace...? - llamó su hermano jurado, Sabo el revolucionario segundo al mando. Koala, amiga del rubio, se preocupo al ver cómo a su compañero comenzaba a costarle respirar y articular palabras desde su garganta, el encuentro era de lo menos tranquilo que la familia de Ace podría experimentar.
- ¡¿Sabo?! Pero-... ¿Cómo es qué estás vivo? ¡¿QUÉ?! ¿Alguien me puede explicar que carajo hace tanta gente enemiga en un mismo sitio? - preguntaba alarmado la dona de fuego, es decir, ¿su hermano Sabo estaba vivo?, ¿había aparecido de la nada en una sala gigante llena de marines y piratas de alto y bajo calibre cuando lo último que recuerda es haber sido asesinado por el Almirante Akainu por salvar a su hermano pequeño? Espera un momento... ¡Luffy! Debía ver si había salido lastimado.
- Mocoso... - susurró Garp sorprendido, desde que recibió una paliza de Dadan le quedó claro que nunca volvería a ver a su nieto adoptivo, pero aquí estaba de nuevo, como si nada hubiera pasado. Dándole la vuelta a un Luffy más silencioso que una tumba solo para ver la gran cicatriz con forma de X en su pecho de goma. Sengoku ya se estaba preparando en dado caso de que su viejo compañero enloqueciera y agarrara a alguien a puños.
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One Piece Reacciona a...
FanfictionNo va a haber ships como tal, sin embargo, van a haber pequeños momentos bastante lindos de algunos ships que me gustan. Me imagino que saben como va la dinámica, así que solo los puedo invitar a que les y disfruten.