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Han Seo se sentó en su cama con la espalda recta y los hombros tensos mientras Han Seok y Choi Myung Hee sacaban varios conjuntos de ropa del armario, Hwang Min Seong había llamado a la abogada para indicarle la hora en la que Han Seo debía estar en el Club al día siguiente así que tanto la abogada Choi como Han Seok estaban decidiendo qué ropa se pondría.
Han Seo ni siquiera podía elegir que ropa vestir y eso lo molestaba, ni siquiera le gustaban esos trajes que siempre usaba, las camisas de vestir con cuellos altos lo asfixiaban la mayoría de las veces y los pantalones ceñidos le picaban en las piernas, pero no podía quejarse porque la primera y última vez que lo hizo su hermano se encargó de golpearlo por atreverse a cuestionarlo.
Así que Han Seo no tiene ropa que le guste, excepto su ropa de ejercicio, por eso va regularmente a ejercitarse, es la única manera en la que puede vestir algo con lo que se sienta cómodo sin que tema que su hermano lo regañe.
—Nada de esto funciona. —Choi Myung Hee hizo una mueca, Han Seok se cruzó de brazos mostrándose de acuerdo con ella. —Tal vez es mejor que vaya al centro comercial y busque algo que sirva, algo casual y elegante podría funcionar.
—Mi pequeño hermano no tiene el suficiente gusto para elegir ropa.
No si nunca me dejas elegir nada pensó Han Seo pero simplemente sonrió con las manos apretadas sobre sus rodillas. —Tienes razón hyungnim, yo no sé vestirme bien.
Han Seok mostró su sonrisa satisfecha dándole una palmada en la espalda a Han Seo que lo hizo tensarse aún más (si es que eso era posible). Choi parpadeó ante la escena pareciendo un poco confundida pero su rostro volvió a ser casi inexpresivo con bastante facilidad una vez que decidió que no valía la pena.
—De todas maneras hay que conseguir algo de ropa, estos trajes son demasiado...inservibles. —dijo la mujer arrugando la nariz. —No se ajustan al gusto del presidente Hwang Min Seong, no hay que cometer ningún error.
—Bueno, si no hay otra opción —Han Seok puso su mano sobre la nuca de Han Seo y lo apretó como señal de advertencia. —, entonces mi pequeño hermano deberá pedirle ayuda a alguna empleada cuando vaya a buscar esa nueva ropa.
Han Seo necesitó de todo su autocontrol para no saltar de su lugar por la emoción, tan solo pensar que podría salir al centro comercial y que tal vez, solo tal vez podría comprar algo que de verdad le gustara, su estómago se revolvió del entusiasmo.
Han Seok se burló dándole un golpecito en la mejilla. —No te emociones tanto que no vas a ir solo.
—P-por supuesto, no se me ocurriría pensar eso.
—Enviaré al abogado Han contigo, se ha vuelto muy inútil últimamente y odio ver su cara, mientras ustedes se ocupan de eso, Choi y yo trabajaremos en el acuerdo que firmara Hwang Min Seong, una formalidad ya que todo es falso, pero necesario al fin y al cabo. Más te vale comprar solo lo necesario, ¿Entendiste?