Era diciembre y generalmente en este mes es cuando mas intentos de suicidio llegan al hospital, como todos los días llegue a las 7:40 am, y espere a que el maestro Asher abriera el consultorio.Me dispuse a revisar el censo y pude ver a una adolescente de 15 años internada por intento de suicidio.
—Maestro ¿puedo pasar con este paciente?
Preséntamelo y te diré si es prudente que lo hagas.— contesto secamente.
Es un paciente femenino de 15 años de edad, ingresada por intento de suicidio por sobredosis de pastillas , específicamente de clonazepam.
Dime a que grupo de medicamentos pertenece el clonazepam y te dejare atender el caso.
Me quede pensando por unos momentos, mi mente estaba intentando recordar todas las clases de psicofarmacología.
El maestro se notaba molesto y su mirada era reprobatoria ante mi silencio.
Vamos Vanessa piensa, no te autosabotees, dije para mi misma.
Cuando al fin iba a decir una respuesta, fui interrumpida por esa irritante voz.
— Pertenece al grupo de benzodiacepinas.
La felicito Valentina.— contesto el maestro Asher
—Lo lamento pero si no sabes algo tan básico tendré que dejarle el caso a otra persona.
— Si, lo lamento estudiare mas — dije con un tono serio
—Maestro, por favor permítame ir a ver a la paciente, creo que puede ser un caso en el cual aprenderé mucho— Contesto Valentina
Me sentía impotente, por un error me castigaba, cuando yo siempre era la que se iba hasta lo último y llegaba puntual todos los días.
Me trague mi enojo y decidí seguir con mis actividades diarias, no fue un día fuera de lo normal, con excepción de que nos dejaron salir temprano, y aproveche para visitar el área de fisioterapia, me había lastimado el hombro días anteriores y ya se estaba volviendo insoportable.
El fisioterapeuta titular no estaba, pues era su hora de comida, aún así decidí esperarlo, los minutos pasaron y me encontré con uno de sus practicantes, me dijo que recién había entrado, me pregunto mi nombre y se presento.
La platica fue muy amena y me hizo olvidar un poco todo el estrés que había pasado con valentina, alrededor de una hora él fisioterapeuta por fin regreso, me quede sorprendida, él no se veía mayor de 30 años.
Me hizo pasar a su consultorio y me pidió que descubriera mi hombro, pero la filipina del uniforme no me permitía hacerlo, al final me la tuve que quitar, sentía frio y vergüenza pero él fue muy respetuoso y nunca me miro con morbo, me dejo unos ejercicios y me receto algunos medicamentos para desinflamar.
Me dio su número y me dijo que si volvía el dolor le mandara mensaje para que me diera cita otra vez.
Me puse mi filipina de nuevo, le agradecí y tome mis cosas, para mi sorpresa el elevador estaba en mantenimiento por lo que tuve que bajar por las escaleras.
— Pensé que ya se había ido— voltee y era él.
seguía enojada así que conteste de manera cortante.
— Si me quede un poco mas, que tenga una buena noche— no le di oportunidad de contestarme y me fui.
Llegar a mi casa era deprimente, tal vez por eso me quedaba mucho tiempo en el hospital, mi papá trabaja todo el día y en sus ratos libres sale con su novia, no me gusta reclamarle su ausencia , desde que se fue mi mamá y nos abandono, él había estado muy triste y ahora que esta saliendo con Rebeca lo veo mas feliz.
Me hice de comer, y leí un poco para después acostarme a dormir.
Eran las 4:00 am y no podía dormir, al parecer me cayo mal lo que comí y me la pase vomitando toda la madrugada.
En cuanto dieron las seis de la mañana le marque a mi tutora de la universidad para informarle mi situación de salud, ella fue muy amable y me dijo que descansara, que mandarían mi justificante al hospital sin problema.
Mi día transcurrió y en la tarde me llego un mensaje.
—"¿No vendrás al consultorio?"—
Me debatí si contestar o no, pero al final él era mi coordinador y le debía una explicación también, aunque estaba segura de que mi universidad ya le habría avisado .
—" No profesor, estoy enferma mi universidad mandara el justificante".
No paso tiempo para que me contestara
" Nunca me llamas profesor y no lo vuelvas hacer tampoco , ¿sabes al menos la diferencia? , un profesor te enseña, te instruye y es general en muchas ocasiones , yo soy un maestro , tengo una maestría , una especialización y te guio, nunca olvides eso Vanessa, yo soy ese maestro que te va a enseñar no solo sobre psicología, sino también de la vida".
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La Manzana del profesor
Jugendliteratur"Ver pacientes es un privilegio que se gana, quedarse solos en el consultorio un regalo."