MONSTER ── PARK SUNGHOON

FINAL

La fría noche había caído. Hyori estaba junto a Jake, la fiesta estaba bien a su parecer, no recordaba haber ido a alguna fiesta de estas puesto que jamás se había dado la oportunidad pero ahora estaba... Disfrutando, un poco.

—Te ves más viva. —dijo Jake.

—Estoy igual, bobo.

El rubio sonrió y se encogió de hombros.

—Algo cambió.

—¿Y qué podría ser?

Jake frunció sus labios sin saber exactamente que responder, solo sonrió de nuevo y pellizcó la mejilla de Hyori.

—No lo sé, pero seguro trae a mi mejor amiga devuelta.

Hyori rodó los ojos con diversión y se alejó de su mejor amigo avisando que iría a buscar a bailar un rato. Las manos de un hombre la jalaron con delicadeza para poder sacarla a bailar.

Ella observó con curiosidad al chico, llevaba una máscara así que no se podía ver bien su rostro, pero a ella le parecía demasiado familiar. Intentó sacarle conversación en medio del baile, pero el chico no respondía a nada, solo seguía bailando con ella. Pero de un momento a otro, los dos se estaban acercando cada vez más, sus rostros cada vez más cerca, más juntos, y cuando sus labios estuvieron apunto de tocarse... Hyori le arrebató la máscara.

Ella se alejó con algo de miedo, sorpresa y molestia al ver el rostro debajo de la máscara: Era Sunghoon. ¿Cómo había llegado ahí? ¿Cómo había salido de la casa? Jamás había hecho eso, ¿cómo pudo hacerlo?

—¿¡Qué haces...

Lo miró con enojo e hizo que la soltara para poder alejarse de allí. Caminó sin rumbo alguno por cualquier lugar de la fiesta, sabiendo que detrás la perseguía Sunghoon. Tiró la máscara al suelo con frustración y finalmente pudo salir del lugar donde era la fiesta, quedando en un callejón algo abandonado.

Sunghoon salió con rapidez detrás de ella y jaló de su brazo con cuidado para hacerla voltear.

—Te dije que no quería verte.

—No puedo alejarme, Hyori, no puedo...

—¡Si puedes! ¡Es tan fácil!

—¿Es que no lo entiendes?

Sunghoon la tomó de los hombros y ella alzó la mirada para verlo.

—No te quiero lejos de mí, Hyori, eres todo lo que necesito...

—Esto está... Esto está muy mal, Sunghoon.

Sunghoon asintió, sus ojos estaban llorosos y no podía apartarlo de los de ella.

—Lo está sí.

—...Sunghoon... Ni siquiera es difícil saber esto. Estoy enamorada de ti ¿okay? Siempre quiero estar contigo, dejé de vivir afuera para poder hablarte, ignoré mis pesadillas solo para seguir hablándole a las sombras bajo mi cama, siento que sin quererlo... Tú me estás alejando del mundo.

Sunghoon negó.

—Hyori yo nunca... Yo jamás te alejé de nada.

—¡Lo hiciste! Y es... Es difícil. Eres todo para mí Sunghoon, pero esto no es normal.

—No escucha. Yo jamás te alejé de nada.

Hyori lo miró en silencio esperando que continuara.

—Tú te alejabas y venías a mí, te sentías mal y venías a mí, siempre preferías hablarme en la soledad de tu cuarto, pero jamás me quejo de eso porque yo siempre he amado estar para ti...