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Park jimin se encontraba en la entrada de su nuevo colegio, suspiro, pues no es fácil retirarte de tu antigua escuela y pasar a otra.

Se dirigió a la Oficina del director del colegio. Al llegar tocó con delicadeza la puerta de madera frente a él. Se escucho un "adelante" por parte del director y este solo asintió y paso.

- Buenos días señor director, soy el nuevo alumno, park jimin - nervioso miro a los ojos del director, que se encontraba tecleando en su computadora -

- Ujum, ya lo encontré en la lista, park jimin, mire ten la lista de las asignaturas... ya te puedes retirar - comentó mirando a alumno.

- Muchas gracias, me retiro, que tenga una buena mañana - dijo rápido y asi salió, casi corriendo de aquella oficina.

Jimin se estaba en una situación de crisis, ¡¡no encontraba su salón!! Era muy grande el Colegio, como Diablos iba a encontrar su salón, y bueno no sabía a quien decirle ya que no conocía a nadie hasta que vio

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Jimin se estaba en una situación de crisis, ¡¡no encontraba su salón!! Era muy grande el Colegio, como Diablos iba a encontrar su salón, y bueno no sabía a quien decirle ya que no conocía a nadie hasta que vio...

- Profesor Min - susurro para si mismo, vio aquel identificador que tenía aquel nombre "profesor Min", wow si que era apuesto y elegante, pero eso ahora no importaba estaban a punto de empezar las clases y el ni había encontrado su querido salón.
Entonces tuvo que acercarse en aquel profesor.

- Hola - saludo con su sonrisa encantadora que hacia desaparecer sus ojos y los hacia en medias lunas.

El profesor volteo a ver a jimin y sorprendido, ya que nadie le hablaba por miedo, también quedó encantado por su hermosa sonrisa del chico lindo.

- Buenos días, que se le ofrece? - pregunto después de salir de su burbuja.

- Me podría ayudar a encontrar mi salón, soy nuevo y no conozco nada, nadita - hablo jimin, haciendo un puchero.

- Esta bien, que asignatura le toca? - dijo con tono formal.

- matemáticas esa - dijo jimin - me podría llevar?-

- Oh, gustamente le toca mi clase no se preocupe - comentó casi con una sonrisa, ¿por que casi sonreí?.

- Me alegra, vamos, vamos - dijo, palmeando con delicadeza el hombro de Min, este último quedo un poco sorprendido por ese tacto, nadie de sus alumnos lo tocaba ni un pelo, por que ese chico si?, a lo mejor por que era nuevo, también varios alumnas y alumnos se quedaron sorprendidos a tal escena que no decidieron decir nada pues ya conocían a Min, el era un profesor de pocas palabras, pero su mirada decía más que mil. Sus ojos, oscuros y penetrantes, recorrían la clase con una intensidad que hacía que los alumnos se sintieran observados hasta en el más mínimo movimiento. Su voz, grave y autoritaria, resonaba en las aulas, imponiendo silencio y respeto. Nunca sonreía, pero de rostro atractivo, reflejaba una disciplina férrea y una exigencia implacable.
Vestía siempre de forma impecable, con un traje oscuro y una corbata que parecía reflejar su propia seriedad.

A pesar de su seriedad el era una persona llena de amor que esperaba tener a alguien, quería tener el amor de alguien, que llegará a su vida, no sabía cuando ni donde pero esperaría por ese bonito amor de kdramas.

Profe MinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora