Historia De Akane🎃Especial De Octubre Parte 4🎃

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Bakugo: Brócoli te toca

Izuku: No, no, yo no he vivido nada de eso y lo agradezco, jamás tuve una experiencia paranormal

Kirishima: Bueno entonces ahora es tu turno hermanita

Akane: Pero tengo muchas historias aunque no lo parezca me han pasado muchas cosas

Bakugo: Cuenta la que sientas que más te eriza la piel de solo recordarlo

Akane: Dejenme pensar... Mmmm... Creo que ya la tengo

Denki: Somos todo oídos, ya que parece que eres la reina del terror

Akane: Con este suceso paranormal sus venas congelaran, hay rima y todo, jaja, ahora me rio, pero cuando lo viví fue horrible

Todos se acomodaron alrededor de Akane con las mantas y la comida escuchando atentamente las palabras que salían de la boca de la bicolor

Historia de Akane

Akane: Seguramente ustedes han escuchado de los famosos duendes que quieren a los niños, pues parece que uno no solo me quería más bien parecía que me adoraba

Izuku: A qué te refieres con adoraba?

Dijo con un tono un poco molesto, acaso nuestro protagonista se acaba de poner celoso?

Akane: Celoso brócoli?

Izuku: No

Akane: Aja, bueno volviendo al tema cuando era más pequeña como a los 5 o 6 años no recuerdo muy bien la edad, yo me sentaba al frente en el salón de clases y había un tipo de tuvo de ventilación en la pared justo arriba de donde yo me hacía y en un momento me dio por mirar arriba y vi un cuerpo pequeño pasar a toda velocidad

Kirishima: El duende

Akane: Dicen que los duendes tienen cuerpo de niño y era un cuerpo de alguien que parecía tener no tanta edad

Denki: Eso no da miedo

Akane: Esperate que apenas ando comenzando

Bakugo: Dejala hablar!

Dijo envuelto en la sábana acostado frente a la bicolor escuchando atentamente

Akane: Gracias oruguita, bueno, me pareció raro, pero no le tome importancia seguí viendo la clase y hubo un momento en el que mi instinto me dijo que mirara arriba y así lo hice, habían unos ojos completamente negros viéndome fijamente. Sentí un escalofrío en todo mi cuerpo y no podía apartar mi vista de él, en un momento sentí como me susurraban en el oído

"No apartes la mirada, iré por ti"

Bakugo: Madre de Dios!

Akane: Mi piel se erizo y no aparte mi mirada de él, bueno, eso fue hasta que la maestra me saco de mi "transe" si le podemos llamar así y luego ya no lo vi ese día

Kirishima: Qué pasó después?

Bakugo: Lo volviste a ver?

Kirishima: Te hirió?

Akane: Sí, lo volví a ver, estaba entrenando en casa, en un momento mi padre me deja sola entrenando y lo vi, esos ojos llenos de oscuridad no los olvidaría nunca, me miraba fijamente de nuevo sentí ese escalofrío recorrer mi cuerpo, tenía mucho miedo. Y si me llegaba a hacer algo? Y si no vuelvo a ver la luz del día? Eran las preguntas que rondaban por mi cabeza a cada segundo que miraba esos ojos y nuevamente algo diciéndome que no apartara la mirada, pero esta vez no haría lo que me dijera; NO TE TENGO MIEDO!!! Le grité y me arrepentí de inmediato ya que mi padre llego y el duende desapareció, pensó que me había vuelto loca. No vi a esa cosa por un largo tiempo

Izuku: Espera, se te volvió a aparecer?

Akane: Así es, volvió a mi cuarto

Izuku: A t-tu cuarto?

Akane: Celosito Midoriya?

Dijo acercándose micho al antes mencionado poniéndolo de los nervios

Izuku: N-no

Akane: Me parece que Midoriya esta Celosito de un duende que me venía a visitar y se me quedaba observando, incluyendo que entro a mi habitación

Dijo a pocos centímetros de él y nuestro pobre protagonista peliverde intentaba desviar la mirada de un lugar que no debería estar viendo de la chica, agradecía qué no hubiera luz para que no puedan ver hasta donde sus ojos iban porque estaría como un tomate

Akane: Mis ojos están arriba

Le susurró de una manera un poco sensual ocasionando cierta reacción en el pecoso

Akane: No sabía que eras así Mi-do-ri-ya

Le dijo en tono burlón aun con ese toque sensual

Izuku: De-deberías seguir con tu relato

Akane: Claro, desviame del tema Midoriya

Mientras la bicolor se alejaba de él, maldecir internamente que Yuki y Kimari le dieran esa pijama a su querido ángel, aunque la visión que tenía de ella cambió un poco al ver muy de cerca las proporciones de la chica

Izuku: (Maldita sea! Saca de tu mente eso! Ella sufrió por como la veían y tú piensas hacer lo mismo?! Controlate!)

Akane: Dónde me quedé?

Dijo llevándose algo de comida a la boca y mandando con un poco de refresco

Bakugo: Antes de que hablaras quien sabe que con el cabeza de brócoli ibas en que el duende volvió a tu habitación

Akane: Cierto, yo normalmente duermo con el cabello suelto y desde pequeña me gusta tenerlo largo. Cuando me fui a la cama sentí algo trenzando mi cabello, pero la manera en la que lo hacía era tan suave, tanto que me estaba quedando dormida y luego le dije al duende "sigue"

Izuku: Có-cómo?

Akane: Pues me gustaba como se sentía y al decir eso, pues, me jaló del pelo



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